Me gustaría iniciar esta modesta columna focalizando en el gran EuroBasket que estamos viviendo. Emocionante, con igualdad máxima, entrega, buenos partidos… En fin: buen baloncesto.
España sin duda está realizando un grandísimo campeonato. Brillante, magnífica, sin duda ha demostrado que ha ido de menos a más y en los encuentros de los cruces ha sido un superequipo que nos ha enamorado a todos. Es lógico que después de tanto sufrimiento estemos gozando, y que resulte una maravilla poder disfrutar de esta gran final.
Y repito: disfrutar. Esta debe de ser la primera premisa que deben cumplir los chicos de España para intentar ser campeones: disfrutar y divertirse jugando. Algunos apuntes:
- Gasol: cómo no podía de ser de otra forma, es inevitable tener que hablar de él. Díos mío, vaya crack. "E.T.", irrepetible. Y esa será la primera cuestión que desarrollar: ¿cómo va a intentar parar Lituania a Pau? A partir de esta realidad, nuestro equipo tiene que leer y manejar los desajustes que se puedan producir e interpretarles con buenas decisiones, quizás para que la ejecución de dichas ventajas sea aprovechada por otros jugadores.
- Concentración e intensidad: Como ya ha demostrado España en partidos anteriores, tienen que ser nuestra religión.
- Reducir los errores no forzados: Mantener nuestro ataque con buen equilibrio (exterior-interior) y seguir apostando por las buenas conexiones, sobre todo del 'Chacho' con Gasol.
- Fundamental jugar con pase extra contra la defensa de Lituania (cuarta mejor del campeonato): Defienden bien con múltiples ayudas y cambios. En este sentido, es importante mantener la paciencia, buscar más pases, seleccionar las acciones de tiro y los espacios, así como meter pronto en partido a Rudy para que no muestre ansiedad.
- Imponer ritmos de partido a campo abierto: Llegar jugando para evitar que formen su defensa, para lo cual debemos dominar ambos tableros (ellos plantean partidos a pocos puntos).
Lituania presenta muchos peligros. Una gran selección que se ha metido en la final por méritos propios, después de reconstruirse y mejorar mucho durante el torneo. Juegan bien por conceptos y, como digo, tienen una buena estructura defensiva. Kazlauskas, su seleccionador, es experto en sacar rendimiento a jugadores jóvenes y en inculcarles espíritu competitivo.
Para mí no siempre dirige bien los partidos, pero ha construido un bloque muy duro mentalmente y con buen engranaje táctico. Y llegan sin presión. No hubiéramos apostados por ellos (parecido a España). Es una final no prevista en quinielas.
Los bálticos tienen una rotación corta, escasamente con seis-siete jugadores, y el cansancio puede ser un factor clave (han tenido, recordemos, un día menos de descanso). Presentan su déficit en las pérdidas de balón.
Valanciunas-Maciulis-Kalnietis, su triángulo mágico. Del trabajo defensivo sobre este último girará gran parte del acierto táctico de nuestro planteamiento. No tiene sustituto: juega más de 34 minutos por partido y es el que lleva la manija de todo su equipo (9 asistencias de media). Sería conveniente trabajar sobre él en toda la cancha y castigarle una y otra vez.
Con Maciulis, el objetivo será no dejarle recibir. O, si lo hace, que sea muy lejos del aro. Es un jugador muy completo y muy desequilibrante. Sobre Valanciunas: gran corpulencia y físico, buen reboteador. Debemos alimentar de balones a Gasol para que le juegue continuamente y meterle en faltas.
Los lituanos juegan bien en mano a mano. Tácticamente, nosotros estamos defendiendo bien este concepto con cambios y espero que sigamos resolviendo esta situación, porque ellos aprovechan mucho estos movimientos. Clave será también la defensa del bloqueo directo frontal que ejecuta casi siempre Kalnietis (a veces Seibutis). Y ojo a los rebloqueos que introducen continuamente para producir. Seguro que España tendrá ya preparado algo para contrarrestar.
Debemos seguir insistiendo en alternativas con nuestras defensas zona press ajustadas. Nos están dando momentos brillantes. Es importante saber escoger los jugadores y momentos para introducirla.
Tendrán un papel importante de los secundarios. Necesitamos a Ribas, a Claver y a la mejor versión de Mirotic, porque Reyes seguro que estará (magnífico campeonato de Felipe, qué gran trabajo). Por Lituania, que no sean desequilibrantes Kuzminskas o Jankunas.
Muchas cosas expresadas, pero nunca olvidemos que cualquier detalle será desequilibrante, y en los últimos partidos España ha conseguido estar perfecta en los tiros libres. Lituania es también muy efectiva en este apartado, así que ojo, que el duelo se puede decantar en este aspecto.
Vamos a ver una final entre dos equipos que llegan a la hora de la verdad bien, mentalmente perfectos. La selección española ha demostrado que es muy fuerte psicológicamente en cualquier situación, por lo que gestionar las emociones será vital.
Veo al grupo muy metido, responsabilizado y comprometido. Seguros de la victoria. No puede haber confianzas, pero sí seguridad en nuestro instinto, fortaleza, trabajo y juego. Este convencimiento es la mejor preparación y lo que nos va ayudar a ganar el oro. Este es un equipo campeón, nos hacen disfrutar y nos sentimos enormemente orgullosos.
Ya lo anunció Gasol: venimos a Francia a por el oro, a ser campeones. Pues todo dicho. "Paulabra de Gasol". Suerte, campeones. Lo merecéis.
* Gustavo Aranzana, todo un clásico de los banquillos de la ACB, fue medalla de plata con la selección española de baloncesto en el EuroBasket de Francia 1999 como ayudante de Lolo Sainz