"Finalmente, hemos decidido ir a Laguna Seca. Tras el último chequeo médico y después de hablar con el doctor Rodríguez, lo vamos a intentar", asegura Jorge Lorenzo en un comunicado de Yamaha.
El mallorquín explica así su cambio de planes: "Al principio pensé seriamente que hubiera sido conveniente más tiempo para la recuperación y volver en Indianápolis, pero en los dos últimos días me he encontrado mucho mejor, así que quiero estar allí (en Laguna Seca), aunque intentaré no asumir demasiados riesgos".
"Quiero estar allí también por los aficionados, por el campeonato pero especialmente por mi equipo, que me está esperando. Quiero agradecer a todos el apoyo que me han dado y dar las gracias a los doctores que me han cuidado desde la caída en Sachsenring, tanto en la clínica móvil como en el Hospital General de Cataluña, especialmente los doctores Rodríguez y Cots", afirmó Lorenzo.
Lorenzo sufrió el pasado día 12 una fuerte caída en los entrenamiento libres del Gran Premio de Alemania, en la pista de Sachsenring, a resultas de la cual se le dobló la placa de titanio que dos semanas antes le tuvieron que implantar en la clavícula izquierda como consecuencia de otro accidente en el anterior gran premio, el de Holanda.
Ahora parece decidido a jugársela de nuevo en el exigente circuito estadounidense, famoso por el Sacacorchos, espeluznante chicane que se toma a ciegas.
