La esposa de Alberto Garzón, Anna Ruiz, de 31 años, permanece en un segundo plano y alejada del foco mediático dejándole todo el protagonismo a su marido, que en los últimos días no para de estar en el foco mediático tras sus polémicas declaraciones. Sin embargo en las redes sociales es totalmente lo contrario, es súper activa.
En su cuenta de Instagram, donde tiene 16.000 seguidores, la mujer del ministro de Consumo y líder de Izquierda Unida (IU) habla sin pelos en la lengua de todo tipo de temas, incluso los relacionados con su vida privada, sexual y familiar. También es habitual ver continuas declaraciones de amor a su marido, del que está muy enamorada, y por el que siente adoración y admiración. Al igual que él.
El matrimonio tiene dos hijas, Olivia, de 3 años; y Chloe, de un año. Desde que Alberto y Anna se convirtieron en padres por primera vez, al año de casarse -en 2017- ella está muy volcada en la maternidad.
De hecho, Anna se encuentra de excedencia del hospital La Princesa de Madrid donde trabajaba como especialista en medicina familiar y comunitaria. Además hace unos seis meses comenzó también un Máster en Anticoncepción y Salud Sexual y Reproductiva.
Anna Ruiz desvela que necesitó ayuda psicológica" por problemas familiares y de alimentación"
Muchas de las publicaciones que comparte la malagueña en Instagram tienen que ver con la maternidad, la lactancia, la importancia de la Madre Naturaleza, la necesidad de cuidarse a uno mismo y de quererse y es que de esto Anna sabe mucho, no solo por el trabajo que desempeña y los estudios que realizó de Medicina en la Universidad de Sevilla sino también por su experiencia personal.
Anna Ruiz ha confesado que tuvo que estar en tratamiento psicológico debido a los problemas familiares que tuvo y a los trastornos de alimentación, como la bulimia, que padeció hace algunos años.
Fui arrastrando atracones de comida y vómitos junto con una dependencia emocional brutal por quien me mostrara un mínimo de amor
En su última publicación, la mujer de Garzón confiesa: "Hice mi primera sesión de psicoterapia con 16 años, por problemas de alimentación y familiares. Lo dejé al poquito y fui arrastrando atracones de comida y vómitos, junto con una dependencia emocional brutal por cualquiera que me mostrara un mínimo amor. Y una necesidad constante de validación".
"Hace unos años decidí volver a empezar terapia. Antes de eso pensaba que yo podía con todo. Enterraba mis mierdas y seguía hacia delante sin darme cuenta que me estaba ahogando. Mis psicólogas me han literalmente salvado la vida", continúa diciendo.
Anna Ruiz confesa: "Ojalá algún día yo pueda contaros que me siento sanada"
Después agradece a todas las profesionales la labor que hacen con motivo del día de la Salud Mental: "Doy GRACIAS, así en grande a todas las profesionales que se dedican a este área tan importante, tan necesaria y que tantas veces se ha desprestigiado y ridiculizado. Gracias a quienes acompañáis, tratáis, medicáis. Y gracias a quienes compartís vuestras historias porque con vuestra sanación sanamos todas".
Anna Ruiz confiesa que aún le queda camino por delante hasta estar totalmente 'bien'. "Ojalá algún día yo pueda contaros que me siento sanada. Siento que aún me queda pero estoy orgullosa de mi camino y crecimiento".
Por último animo a las personas que no se encuentren bien a pedir ayuda a profesionales. "Y si tú estás en ese punto en el que sientes que ya no puedes más, pide ayuda, hay opciones, hay salida. Y es importante avanzar. Os abrazo".
Continuas declaraciones de amor a su marido Alberto Garzón
Uno de los grandes apoyos en la vida de Anna, es Alberto, quien le ha ayudado a crecer como persona y a sentirse más segura consigo misma.
La pareja se conoció durante un mitin político en Ronda, Málaga, de donde es ella. En 2016, el político de Izquierda Unida (IU) le pidió matrimonio tras cuatro años de relación, tal y como él mismo anunció en su cuenta de Instagram.
"En el mismo sitio en el que la conocí y en el mismo metro cuadrado. Pero justo cuatro años después. Ocurrió hace un mes, durante una noche iluminada por las intenciones. Y me dijo que sí, que aceptaba casarse conmigo. Como el mundo sigue necesitando de compromiso, nosotros continuamos luchando juntos", escribió entonces.
El matrimonio suele intercambiarse continuos mensajes de amor. La médico destaca continuamente lo buen padre y marido que es. Incluso habla de los obstáculos que han ido pasando juntos y les ha hecho más fuertes, como el gran cambio que ha sido el convertirse en padres.
Doy las gracias por tener un compañero que ha sabido adaptarse a este gran cambio... con sus meses de no querer sexo, agotamiento...
En una publicación escribe: "No es nuestra mejor foto. Pero hacía mucho, pero mucho, que no nos hacíamos un selfie juntos. Todas nuestras fotos ahora son de nuestras peques. Tras el terremoto de la ma/paternidad es importante reencontrar a la pareja. Me hace gracia cuando me dicen que "lo más importante debe ser la pareja y no debe cambiar nada con la llegada de las criaturas". Y me hace gracia porque es absolutamente falso, creo que sería un problema si todo permaneciese exactamente igual".
Y añade: "Así que doy las gracias por tener un compañero que ha sabido adaptarse a este gran cambio tanto como yo, con sus meses de no querer sexo, sus días de agotamiento total, sus momentos de rabia por necesidades no atendidas… hemos evolucionado y cada día te quiero más y más @agarzoniu . Feliz de cambiar y reencontrarme contigo".
La mujer de Alberto Garzón señala: "Me gusta ir descalza y desnuda por casa"
Anna Ruiz se muestra muy transparente, tal cual es en las redes sociales, y de vez en cuando desvela algunos de los aspectos más desconocidos de su vida privada como.
En su cuenta de Instagram se muestra transparente y enseña algunas de las aficiones o gustos que tiene como que le gusta ir descalza, le encanta cantar, se describe como "cantante de ducha profesional", es adicta al agua, le gusta ir desnuda por casa, tiene ascendencia española, venezolana y belga, le da miedo pensar en el espacio exterior, tiene las mínimas luces de casa encendidas, le encanta tener velas y es "una friki pagana".
Habla de sus 'rarezas': "Siempre he odiado mis tetas (me parecen enormes) y me gustan mis clavículas y piernas"
También desvela "las cosas raras" que tiene, entre las que están el que no soporta que le toquen la cara interna de las muñecas, las arañas le parecen "seres fascinantes", "las pelis de mi vida son 'Moulin Rouge' y 'Prácticamente Magia'", su director favorito es Tim Burton, so suele usar perfume, se le da fatal meditar pero todas las semanas".
Continúa diciendo: "Siempre he odiado mis tetas (me parecen enormes), lucho en mi fuero interno por quererlas como son y no terminar operándomelas, pero tengo esa duda siempre ahí" y le "gusta mucho la zona de mis clavículas y mis piernas".
