Tras su primer mes al frente de la Secretaría de Estado de Energía, Alberto Nadal empieza a perfilar sus planes para el sector eléctrico, tras el fracaso inicial de José Manuel Soria en su intento por resolver el déficit de tarifa, el mayor problema del sector. Nadal ha trasladado a personas de su entorno de confianza las dos principales medidas que tiene en mente para la “verdadera” reforma energética que ha prometido Soria: un recorte de las primas a las renovables y la modificación del funcionamiento del mercado mayorista de electricidad que ya ha adelantado el propio ministro.
Es muy improbable que las medidas se adopten de forma inmediata, una vez que Industria ha eliminado el tope legal de déficit de tarifa para este año. Además, Nadal todavía no ha mantenido contactos con los distintos agentes del sector, que están deseosos de trasladar sus propuestas al nuevo secretario de Energía. A corto plazo, fuentes del sector apuntan que la orden de peajes cuya publicación retrasa el Ministerio desde hace un mes podría no incluir la habitual actualización de las primas en función del IPC, en lo que sería un primer aperitivo de lo que vendrá después para contener la factura de las primas (casi 9.000 millones el año pasado).
A la espera del alcance de esa reforma del denominado pool, que algunas fuentes señalan que será “profunda”, el recorte de primas que estudia Nadal podría seguir el guión marcado por el anterior titular de Industria, Miguel Sebastián, cuando bajó un 30% la retribución de la fotovoltaica por un periodo de tres años (que finaliza este año) y extendió en cinco años, hasta 30, el derecho a cobrar prima para estas plantas.
El departamento de Soria siempre ha considerado que una medida de este tipo, pese a ser retroactiva, se ajusta a la ley, aunque está por ver el desenlace del arbitraje internacional que ha planteado un grupo de fondos extranjeros contra la medida de Sebastián, un proceso del que el mes pasado se celebró una nueva vista entre las partes Ginebra (Suiza) sobre cuyo resultado el Gobierno no hace comentarios.
El propio Soria, cada vez que tiene ocasión, aboga por respetar la “seguridad jurídica” y garantizar la “rentabilidad razonable” de las instalaciones. Un recorte de esta naturaleza no necesitaría del visto bueno del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, con el que Soria protagonizó un enfrentamiento público el verano pasado a cuenta del impuestazo al sector en vigor desde este mes, que Industria pretendía inicialmente que no fuera homogéneo para todas las tecnologías. Finalmente, Hacienda se impuso.
Alemania acaba de anunciar que congelará las primas hasta 2014
El entorno para una medida de este tipo parece ahora algo más propicio, después de que Alemania, que ha presionado de lo lindo para defender a los inversores de energías renovables en España (hay muchos fondos y grandes grupos industriales germanos presentes en el sector, especialmente en termosolar), haya anunciado esta semana que prepara una congelación de los incentivos a las energías limpias hasta 2014 para evitar incrementos de tarifa en los precios finales de la luz.
La opción de alargar el plazo de percepción de primas sólo sería en puridad aplicable a la fotovoltaica, ya que la eólica y la termosolar dicho periodo se limita a la vida útil de las plantas. En el caso de los aerogeneradores, esta ronda los 20 años, un plazo que está a punto de cumplirse para los parques más antiguos, por lo que la idea de Nadal (menos primas a cambio de cobrar más años) sólo tendría sentido si viniera acompañada de algún tipo de plan renove para los molinos como el que reclama el sector desde hace tiempo. En el caso de la fotovoltaica, una opción sería prorrogar el recorte que caduca a finales de año a cambio de más años de vida para las plantas.
Queda la incógnita de qué compensación puede ofrecer Nadal a las plantas de energía termosolar, teniendo en cuenta que el Real Decreto 661 (que fija su retribución) no establecía ningún límite al periodo de percepción de la prima. Esta tecnología, la última en llegar (todavía seguirá instalando megavatios este año), ya ha sufrido un recorte adicional de en torno al 14% con la retirada de la prima a la producción con gas, que, sumada al impuesto general al sector, y siempre según los promotores, ha dejado a las plantas en “rentabilidades negativas”.
Industria, fiel a la norma del ministerio desde que Soria está al frente, no comenta ninguna de las posibles medidas.