La agrupación que concurrió a las ayudas del Perte del coche eléctrico liderada por Seat y Volkswagen ha dado a conocer su proyecto destinado a electrificar la automoción española, impulsando una movilidad sostenible y promoviendo un cambio histórico en la industria de nuestro país.
La puesta de largo de este ambicioso proyecto ha tenido lugar en un acto que ha contado con los discursos iniciales por parte de María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, y Wayne Griffiths, presidente de Seat y de la patronal del sector, Anfac, mientras que Marc Riera, presidente de la agrupación Future: Fast Forward, ha sido el encargado de poner el broche final tras los cuatro paneles en los que se han reflexionado y debatido sobre los diferentes proyectos que darán forma a la nueva movilidad eléctrica y sostenible.
La agrupación va a desarrollar 86 proyectos en 9 comunidades autónomas de la mano de 52 de sus socios, para los que se ha movilizado una inversión de 10.000 millones de euros. De este total, 7.000 millones de euros provienen del Grupo Volkswagen, Seat y PowerHoldco y 3.000 del resto de los socios. De esta suma, 357 millones han sido facilitados por el Gobierno de España a través de los Fondos de Resiliencia y Transformación Next Generation.
Unas ayudas que en el Estado multiplicará por cinco en forma de impuestos pues se calcula que esta iniciativa empresarial tendrá un impacto de 145.000 empleos en la industria del automóvil entre puestos de trabajo directos, indirectos e inducido y generará "2.400 millones de euros en impuestos y cotizaciones a la Seguridad Social” tal como señalaba Wayne Griffiths en la presentación del proyecto.
Nuevo Perte y nuevos plazos
Una presentación del proyecto que llegaba apenas un día después de que la ministra de Industria, Reyes Maroto, afirmase que "entre marzo y mayo" se van a sacar las convocatorias de la segunda línea europea de proyectos del PERTE del Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC), que será más flexible y que permitirá presentarse a empresas con pequeños proyectos en solitario.
En una entrevista a Efe, Maroto afirma que esos son los plazos que trabaja su departamento para la segunda línea de proyectos, ya que quieren que se ejecuten antes de final de año.
La ministra señala que se ha avanzado mucho en la propuesta hecha a la Comisión Europea de alargar hasta 2028 los plazos de ejecución de esta línea, que supondría unos tres años más respecto al plazo actual, en el que hay tiempo para ejecutar las inversiones hasta julio de 2025.
"Las negociaciones van muy bien, hemos hecho una propuesta sensata desde el punto de vista de no perder inversiones y capacidad de aprovechar los fondos europeos, y ahora mismo tenemos un horizonte claramente más cerca: 2028", asegura.
En la nueva convocatoria, añade, habrá novedades y se ha conseguido reducir las garantías exigidas a las empresas para cumplir "de una manera más fácil y más flexible los requisitos de la línea", lo que según Maroto beneficia sobre todo a las pymes.
La flexibilidad de la nueva línea permitirá, dice la ministra, que se puedan presentar "empresas con proyectos pequeñitos sin necesidad de ir en agrupación empresarial", como se exigía en la primera línea.
"El objetivo del Gobierno es cerrar este proyecto con los mejores resultados, ejecutando el cien por cien de los recursos que pusimos a disposición", concluye. En la primera convocatoria del PERTE se adjudicaron sólo unos 800 millones de los casi 3.000 millones que tiene de dotación.
