Los dueños de Naturgy, la mayor gasista española de España, se ven las caras este martes en la junta de accionistas de 2025. Una de las reuniones más importantes que se recuerdan en los últimos tiempos en la empresa que cotiza en el Ibex 35.
Porque este martes se rubricará el pacto entre caballeros que adelantó el pasado febrero el presidente de la compañía, Francisco Reynés, tras los resultados anuales. Los fondos de inversión que ostentan casi la totalidad del capital social de Naturgy se comprometieron a vender participaciones a la propia empresa para que la gasista las venda luego al mercado y consiga aumentar liquidez de sus acciones en circulación.
La energética planea una operación de aproximadamente 2.332 millones de euros con el objetivo de aumentar su 'free-float' alrededor del 15%. Dicha operación contará, como se mencionaba anteriormente, con el respaldo de sus principales accionistas como Criteria, BlackRock, CVC/Rioja e IFM, a la OPA voluntaria. Criteria, el hólding de La Caixa, ostenta el 26,7% del capital de Naturgy, seguido de BlackRock con el 20,9%, CVC/Rioja con el 20,7% e IFM con el 16,9%.
La operación tendrá un costé de alrededor de 2.330 millones de euros, puesto que la propia Naturgy comprará los títulos a un precio de 26,50 euros por acción. Este lunes, el título se situó en los 25,30 euros por lo que los principales accionistas se asegurarán una plusvalía en el movimiento ideado a principios de año.
La auto opa, que será secundada por los principales accionistas, no obstante, también deja dudas sobre el futuro accionarial de la compañía. La idea de abandonar de CVC y BlackRock sigue presente y Criteria Caixa y la propia directiva de la compañía intentan buscar estabilidad en el capital social de la gasista, tras el fiasco de atraer a Taqa, la principal eléctrica emiratí.
Fuentes del mercado insisten a este periódico que el holding español y Francisco Reynés siguen “peinando el mercado” en búsqueda de “un socio fiable para garantizar la estabilidad en los próximos años”. Con la auto opa, aquellos fondos que dan por amortizada su vinculación con Naturgy recibirán algo de dinero por la venta de acciones, si bien no sacia el deseo de abandonar el accionariado de la compañía.
Otra de las opciones que sobrevuela en los mercados es la de que algún accionista de relevancia pueda ir de compras, una vez que Naturgy suelte las acciones recompradas a los fondos de inversión. No obstante, otras fuentes apuntan que “lo lógico sería negociar con los fondos que se quieren marchar” del accionariado de la empresa.
Francisco Reynés aseguró en la rueda de prensa del pasado febrero que el motivo para acometer la recompra de acciones es la de volver a figurar en los índices MSCI. La empresa fue expulsada puesto que no contaba con la suficiente liquidez sobre el parqué.
Más consejeros
El pacto entre caballeros de accionistas de Naturgy también fija el aumento de miembros del consejo de administración para garantizar la representación de todos los accionistas de forma acorde.
Así, el órgano ejecutivo pasará de tener 12 consejeros a 16. De esta forma, Naturgy reorganiza el consejo para conceder un segundo representante al fondo australiano IFM, que suma un 16,9 % del capital, un movimiento que comporta a su vez que Criteria pase a tener cuatro consejeros y que los fondos CVC y GIP dispongan de tres cada uno.
De los 16 representantes, habrá ahora 12 dominicales (cuatro de Criteria, tres de GIP, tres de CVC y dos de IFM) y seguirá habiendo tres independientes y un ejecutivo, que es Francisco Reynés, el presidente de la compañía.
Los proxies, a favor
Con el consenso de los principales accionistas de Naturgy en los dos principales puntos de votación en la junta que se celebra este martes, los proxies (compañías especializadas en asesoramiento) también ven con buenos ojos la operación de la auto opa anunciada en febrero por la gasista.
Así, ISS y Glass Lewis, los dos principales proxies mundiales, han recomendado a sus clientes que voten a favor de la compra de acciones por parte de Naturgy. Los proxies indican que la operación puede beneficiar a la estabilidad accionarial y también a la compañía.