La tasa de inflación interanual de la zona euro se ha situado en julio en el 2,2%, tres décimas por encima de la lectura del 1,9% en el mes de junio y el mayor incremento de los precios desde julio de 2018, según el dato preliminar publicado por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
En el conjunto de la Unión Europea (UE), los precios subieron en julio un 2,5% interanual, frente al incremento del 2,2% del mes anterior.
El repunte de los precios en julio en la zona euro reflejó un mayor encarecimiento de la energía, con una subida interanual del 14,3%, frente al 12,6% de junio, así como de los alimentos, que subieron un 1,9%, después de haber bajado un 0,3% el mes anterior.
Asimismo, los servicios subieron los precios un promedio del 0,9%, dos décimas más que en junio, mientras que los bienes industriales no energéticos se encarecieron un 0,7% en julio, medio punto porcentual menos que en junio.
Sin tener en cuenta el impacto de la energía en la inflación, la subida de los precios en julio fue del 0,9%, una décima más que en junio, mientras que al excluir también del cálculo los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente se situó en el 0,7%, por debajo del 0,9% de junio.
Entre los Veintisiete, las tasas de inflación más bajas se observaron en Malta (0,3%), Grecia (0,7%) e Italia (1%), mientras que las mayores subidas correspondieron a Estonia (4,9%), Polonia y Hungría (ambos 4,7%).
En el caso de España, la tasa de inflación armonizada en julio fue del 2,9%, cuatro décimas más que en junio, lo que amplía a 0,7 puntos porcentuales el diferencial de precios desfavorable al país respecto de la zona euro.