En España, en el pasado mes de diciembre, se pagaron 10.281.477 pensiones, un 1,68% más que en el mismo mes del año anterior, a un total de 9.304.060 pensionistas, según los últimos datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social. A pesar de estas elevadísimas cifras, casi el 20% de la población, no es fácil alcanzar la condición de pensionista ni en nuestro país ni en ningún otro.
En el año recién empezado, la edad de jubilación ordinaria se ha incrementado en dos meses en relación con la de 2024. Se necesitan tener cumplidos 66 años y 8 meses y además contar al menos con 38 años y 3 meses cotizados a la Seguridad Social. Solo en el caso de superar esta cifra el aspirante puede jubilarse al cumplir los 65 años.
Menos fácil es jubilarse anticipadamente. Para poder acceder a la jubilación anticipada hasta dos años antes de cumplir la edad legal ordinaria es necesario haber cumplido 64 años y 8 meses siempre y cuando no se hayan cotizado 38 años y 3 meses incluido el tiempo que resta para alcanzar la edad legal. Si se han cotizado 38 años y 3 meses o más a la Seguridad Social se puede uno jubilar anticipadamente a partir de los 63 años.
Con estos imperativos y teniendo la amenaza de los coeficientes reductores, jubilarse anticipadamente se ha convertido en un lujo. En 2024, apenas el 29% de las personas que accedieron a la jubilación lo hicieron anticipadamente, cuando en el año 2015, hace diez años, representaron el 43,8% del total. Son ocho años de descensos continuados y en 2020, el año de la pandemia, se bajó por primera vez del 40%.
Menos de 100.000 personas
Según las cifras del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), entre los meses de enero y noviembre (últimos datos publicados), se han jubilado anticipadamente en España un total de 98.204 personas, lo que se traduce en una media mensual cercana a los 9.000 ciudadanos. Para el conjunto del año se esperan un total aproximado de entre 107.000 y 108.000 personas, 3,6% menos que en todo el año 2023.
Del total de jubilaciones anticipadas, 66.131, el 67,34% se llevaron a cabo con coeficiente reductor y de todas estas, 54.205, casi el 92%, de forma voluntaria. Otras 8.619 altas iniciales se realizaron con bonificación (apenas el 8,77%); 23.195 fueron jubilación parcial, y apenas 259, jubilación especial a los 64 años.
Los coeficientes reductores están directamente relacionados con los años que se adelanta la jubilación y los años que el aspirante lleve cotizando a la Seguridad Social. Por ejemplo, una persona que dos años antes de la edad legal hubiera cotizado 37 años a la Seguridad Social verá reducida su pensión a razón de un coeficiente reductor del 2% por trimestre.
En los once primeros meses del pasado año, el número de altas iniciales de jubilación ascendió a 338.771, según el INSS. De esta cantidad, 240.993, el 71% del total, correspondió a jubilaciones en la edad ordinaria. De esta cifra, 31.876 fueron jubilaciones demoradas y 214, parciales.
Carreras profesionales extensas
Por regla general, las personas que adelantan su jubilación son personas con carreras profesionales muy extensas y salarios normalmente altos. Lo demuestran las cifras de la Seguridad Social. La pensión media de las altas iniciales de quienes se jubilan anticipadamente en el conjunto de los regímenes ha sido en 2024 de 1.772 euros mensuales, mientras que la de quienes dejaban de trabajar a la edad ordinaria fue de 1.481 euros, un 16,4% inferior.
En el caso de las mujeres, la diferencia es mayor aún: 1.627 euros las anticipadas y 1.312 euros, las ordinarias, un 19,36% inferiores. En los hombres la brecha es de 2023 euros (1.842 frente a 1.639), lo que supone un 11% menos para las jubilaciones ordinarias.
También hay notorias diferencias si se comparan las pensiones de los jubilados del régimen general (la mayoría) y del régimen especial de trabajadores autónomos. En el general, las pensiones anticipadas suponen el 31,4% del total, aunque en 2015 representaron el 50,2%. En el caso de los autónomos, apenas de jubilan anticipadamente el 14,2% de todos, frente al 85,8% que espera a tener la edad legal.
Difieren sustancialmente también los importes. Los pensionistas del régimen general que alcanzan esa condición antes de la edad ordinaria cobran de media 1.815 euros mensuales, frente a los 1.602 euros de los otros. Son 213 euros más, el 11,7% en términos relativos. En el régimen de autónomos las diferencias van de los 1.184 euros de quienes la anticipan a los 996 euros de los que esperan a alcanzar la edad reglamentaria.
La edad media a la que se alcanzó la jubilación anticipada fue el pasado año de 63,5 años, por 66 de la ordinaria. En el régimen general, la edad media de los que se jubilan antes es de 63,2 años frente a 65,8% de los otros, y en el de autónomos, de 64,1 años frente a 66,6 años de quienes tienen algo más de paciencia.
