El Santander desenreda poco a poco la maraña de sociedades heredadas del Banco Popular. Este fin de semana, la entidad de Ana Botín ha realizado la integración de las tarjetas de Wizink en su totalidad, según ha confirmado fuentes del Banco Santander a Vozpópuli.

A partir de hoy, todos los clientes de Wizink-Popular podrán sacar dinero sin coste alguno en los 7.500 cajeros que tiene el banco rojo en España y los 30.000 mundiales. Esto significa que los clientes sólo podrán operar desde la aplicación oficial del Santander y tendrán acceso a todas las aplicaciones del mismo. 

Una de las principales preocupaciones de Ana Botín era la alianza que tenía la entidad financiera con el fondo Värde Partners. Finalmente, el Banco Santander consiguió quedarse con el negocio de tarjetas del Popular a cambio de ceder el 49% en Wizink.

El fondo norteamericano sigue gestionando el resto de plásticos heredados de Citibank y Barclays, entre otras. También controla unos 3.000 millones en depósitos y otros 3.000 millones en tarjetas de crédito. 

Cajeros

Otro gran acuerdo fue el de los cajeros del Popular. Tras meses de negociaciones, Santander firmó un pacto con Euro Automatic Cash, sociedad dueña de los cajeros de la filial.

Las dos sociedades rehacen el viejo acuerdo de 2014: Santander toma el control de los cajeros del Popular a cambio de "traspasar a Euro Automatic Cash el negocio de sus cajeros desplazados [los que están en centros comerciales o fuera de las oficinas]".

Hasta ahora, los clientes del Popular podían usar los cajeros de Santander, pero no viceversa. A partir de ahora, la entidad presidida por Botín instalará nuevos cajeros en la red Popular para ofrecer "un servicio más completo".

Precisamente este acuerdo es el que ha provocado que los clientes de ING se queden sin poder sacar dinero de forma gratuita en los cajeros del Popular integrados en las oficinas, que ya son oficalmente Banco Santander.