No hay en el mercado muchos modelos como el Panda Cross y el Ignis, orientados a un uso urbano pero con un marcado carácter off-road. Tanto uno como otro cuentan en sus gamas con variantes de tracción delantera y personalidades casi 100% urbanas, por lo que estos dos 4x4 se desmarcan orientándose hacia quienes quieren disfrutar lejos del entorno urbano. Porque con muy diferentes motores pero ambos con 90 CV, sus prestaciones permiten alejarse fácilmente de la ciudad y dejar atrás la carretera en busca de pequeñas, o no tan pequeñas, aventuras off-road. El bajo peso y la tracción total lo facilita mucho, y ambos son capaces de llevarnos más lejos de lo que puedes esperar.
En ciudad, sus carrocerías de apenas 3,7 metros de longitud les confieren una gran viveza entre el tráfico, y la altura de su carrocería añade un plus de visibilidad y facilidad para maniobrar en espacios muy reducidos, sobre todo en el caso del Panda Cross, en el que la función City de la asistencia de la dirección permite mover el volante a baja velocidad casi con un dedo. Una suavidad para rápidas maniobras que hace muy fácil su conducción, aunque no se acompaña de un tacto del motor bicilíndrico especialmente agradable a bajo régimen. Sí lo es en este sentido el motor de cuatro cilindros de 1,2 litros del Ignis, más aun con el sistema de micro hibridación tan de moda que logra precisamente en ciudad una respuesta aún más suave a muy baja velocidad. Sin duda, para el día a día el tacto del pequeño Suzuki resulta más convincente, con unos consumos además más bajos todavía, unos 4,5 l/100 km frente a los poco más de 5 l/100 km del Panda Cross.
Divertidos
Aunque pequeños en dimensiones, Ignis y Panda Cross se mueven con mucha más soltura y eficacia de la esperada en carretera. Y no sólo por el dinamismo que le otorgan sus buenas relaciones peso/potencia, sino por unos bastidores que apoyados en sus sistemas de tracción total cumplen con buena nota en territorios virados. Ninguno brilla a la hora de moverse a muy alta velocidad por ruido o un aplomo que no es comparable a SUV de carrocerías más grandes, y es en carreteras de segundo orden donde más cómodos se encuentran.
El motor del Panda Cross ofrece más dinamismo en su respuesta gracias a su sistema de sobrealimentación que se deja sentir con un medio régimen más lleno que el muy elástico y progresivo motor atmosférico, más agradable en su funcionamiento pero sin el empuje una vez en marcha de su rival italiano. En cualquier caso, mantener cruceros de 120 ó 130 km/h de marcador es fácil en cualquiera de ellos, aunque las seis velocidades del Panda Cross –cinco en el Ignis– le permiten más desahogo a esas velocidades. Los consumos favorecen ligeramente aun así al Ignis, con 5,8 l/100km de media en carretera a ese ritmo y unos 6,3 l/100 km el Panda Cross.
En ambos, el espacio interior está condicionado por sus cortas longitudes de carrocería, y aceptan cuatro ocupantes con más comodidad de la esperada, con ligera ventaja para el Ignis en unas plazas traseras con algún centímetro más de espacio de piernas. En su contra, que está homologado sólo para cuatro ocupantes, mientras que el Panda Cross lo está para cinco. Difícil que entren tres adultos, pero sí niños de no demasiada envergadura. Sorprende en cualquier caso lo bien aprovechado que está el espacio interior, aunque los maleteros se quedan en cifras propias de sus dimensiones exteriores, poco más de 200 litros que dan para dos o tres maletas de tamaño medio. Eso sí, en el Ignis la posibilidad de regular longitudinalmente las plazas traseras permite jugar con el espacio interior y ampliar la capacidad de carga cuando se necesite.
Pero donde de verdad se disfrutan Panda Cross e Ignis es fuera del asfalto. Quien ponga el ojo en uno de estos dos pequeños modelos 4x4 lo hará porque tarde o temprano buscará cierta diversión en campo, donde sus bajos pesos, sus alturas libres al suelo –dos centímetros más el Ignis que el Panda Cross– y sus buenas cotas off-road hacen muy fácil abordar pasos complicados más allá de pistas y caminos en mal estado.
En el Ignis el sistema Grip Control incluye control de descenso de pendientes y un modo de funcionamiento del control de tracción que funciona hasta 30 km/h y se encarga de transmitir la fuerza del motor a aquellas ruedas que pueden hacer hacer avanzar el coche y frena aquellas que deslizan. En el Panda Cross, el sistema «Torque on demand» mantiene activo siempre la tracción total, con un 98% del par a las ruedas delanteras que varía de forma automática en función del estado del firme o si activamos el modo «Off-Road» a través del mando «Terrain Control». Si bien la eficacia de ambos es muy elevada y permite sortear pasos muy complicados, la suavidad de respuesta del motor del Ignis a bajo régimen lo hace todo algo más fácil con mejor tacto a muy baja velocidad.
FICHAS TÉCNICAS
FIAT PANDA CROSS
VERSIÓN 0.9 TWIN AIR 4x4; MOTOR Gasolina, 2 cilindros en línea, turbo; CILINDRADA 875 cm3; POTENCIA 90 CV a 5.550 rpm; PAR MÁXIMO 145 Nm a 1.900 rpm; VELOCIDAD MÁXIMA 167 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 12,0 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 6,3 l/100 km; AUTONOMÍA xxx km; DIMENSIONES 3.705/ 1.662 / 1.657 mm; NEUMÁTICOS 185/65 R 15; PESO EN VACÍO 1.165 kg; MALETERO 225 l; PRECIO 16.700 €
SUZUKI IGNIS
VERSIÓN 1.2L 4X4 MILD HYBRID GLX; MOTOR Gasolina, 4 cilindros en línea, atmosférico; CILINDRADA 1.242 cm3; POTENCIA 90 CV a 6.000 rpm; PAR MÁXIMO 120 Nm a 4.400 rpm; VELOCIDAD MÁXIMA 165 km/h; ACELERACIÓN 0-100 KM/H 11,9 s; CONSUMO EN RECORRIDO PRUEBA 5,8 l/100 km; AUTONOMÍA xxx km; DIMENSIONES 3.700/ 1.690 / 1.595 mm; NEUMÁTICOS 175/60 R 16; PESO EN VACÍO 945 kg; MALETERO 204 l; PRECIO 17.070 €
