El juicio del caso Nóos da para todo. También para que surjan amistades en el banquillo de los acusados. Según ha podido saber este Buscón, el asesor fiscal Salvador Trinxet, a quien Manos Limpias acusa de un delito de blanqueo de capitales, lleva todos los días de juicio la comida al único preso con el que cuenta dicho banquillo de los acusados: Miguel Ángel Bonet.
La mayoría de los procesados del caso Nóos aprovechan ese tiempo para salir a comer a los restaurantes de alrededor
A diario el tribunal presidido por la magistrada Samantha Romero concede un receso de una hora aproximadamente para que los acusados salgan a comer por el polígono San Rossinyol de Palma de Mallorca donde se está celebrando este macrojuicio.
La mayoría de los procesados del caso Nóos aprovechan ese tiempo para salir a comer a los restaurantes de alrededor pese a la gran presencia de medios de comunicación que hay en la zona. Todos pueden abandonar la Escuela Balear de la Administración Pública de Palma, excepto uno: el exsecretario de Ibatur al que Trinxet lleva todos los días el almuerzo.
La razón es que Miguel Ángel Bonet es trasladado cada mañana desde prisión para asistir al juicio por esta pieza separada del caso Palma Arena debido a que el imputado está cumpliendo condena por otro caso de corrupción. Pese a ello, el asesor fiscal Trinxet se solidariza con él.