El Partido Socialista se olvida en excesivas ocasiones de sus clásicos. Esa es, al menos, la opinión de muchos de los asistentes la pasada semana a un acto que se viene produciendo anualmente en la Comunidad de Madrid donde se premia el trabajo de los mejores médicos y sanitarios de la región. En el acto le fue entregada a Pedro Sabando, exconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, la Cruz de Oro en su categoría de oro.
Fue el propio Ignacio González el que le entregó la Cruz y no tuvo reparos en reconocer el trabajo que hizo Sabando y el resto de los galardonados en defensa de la Sanidad pública.
Los líderes del PSOE de Madrid fueron invitaros, pero no acudieron ni Tomás Gómez ni representantes del partido. Tan sólo Joaquín Leguina, a nivel particular, y el doctor Blanco, uno de sus colaboradores, acudieron a un acto. Sabando fue subsecretario cuando se redactó la Ley de Sanidad poco después de la llegada al Gobierno de Felipe González. Está considerado, además de como un médico excepcional, como uno de los autores de aquella importante Ley.
Hace algún tiempo los amigos más cercanos a Fernando Morán, encabezados por Silvia Escobar, organizaron un homenaje al exministro de Asuntos Exteriores. Tampoco hubo representación oficial del PSOE, a pesar de lo importante que fue Morán en aquellos tiempos de reformas y del ingreso en la Unión Europea. “Estos jóvenes –decía un conocido socialista a este buscón- se han olvidado de sus mayores y de lo que hicimos por poner a España al nivel que se merecía”.