La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, está entusiasmada con las bicicletas como medio alternativo para el transporte en Madrid. Hace unos días participó con el embajador de Holanda, Matthijs van Bonzel, en el Cycling Festival Europe, la fiesta europea de la bicicleta, promovida desde la presidencia holandesa de la Unión Europea. La fiesta consistió en un paseo por La Castellana y un acto en el Palacio de Cibeles.
La alcaldesa aprovechó para recordar los proyectos de la ciudad para potenciar el uso de la bicicleta como son la ampliación de los carriles ciclistas, carriles únicos y ampliación de BiciMad para llegar fuera de la almendra central y las universidades.
Uno de los proyectos que tiene la alcaldía para destacar la importancia de la bici en la “nueva ciudad” es enviar al desfile militar del 2 de mayo a la patrulla ciclista de la Policía Municipal, algo que no ha caído muy bien en el cuerpo, que solía enviar a las UCS (antidisturbios), sección hoy en proceso prácticamente de disolución.
Hay quien considera que las patrullas ciclistas no son representativas de la Policía Municipal
En ese acto participa una unidad del Ejército, la Guardia Civil, Policía Nacional y las Bescam, policías municipales pagados por la Comunidad de Madrid. La representación de la Policía Municipal solía ser importante. Algunos consideran que las patrullas ciclistas no son representativas de la Policía en un desfile en el que cada uno quiere mostrar lo mejor de sus fuerzas. Antes de la crisis el acto de la calle solía terminar con el paso de la Patrulla Águila del Ejército del Aire.
El apoyo a la bici del equipo de Carmena ha llevado a la concejalía de Seguridad a aumentar en 25 las plazas para policías ciclistas que se ocupan de patrullar, especialmente, por los parques de la ciudad, mientras que otros departamentos andan justos de efectivos.
