El expresidente del Gobierno Adolfo Suárez propuso al Rey don Juan Carlos que revocara su dimisión un día después del intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, según relata la periodista Pilar Urbano en una entrevista concedida al diario 'El Mundo' con motivo de la publicación de su libro 'La gran desmemoria. Lo que Suárez olvidó y el Rey prefiere no recordar'. La obra, que pretende explicar cuál fue realmente el papel del Rey en el 23-F, saldrá a la venta este jueves.
"El Rey nos salvó in extremis de un golpe que había puesto en marcha, no queriendo que fuera un golpe, queriendo que fuera una solución, pero Adolfo decía: '¡Esto es un golpe!'", afirma Urbano en la entrevista. El libro desvela aspectos hasta ahora inéditos sobre Armada, Milans y Tejero y la reacción que tuvieron el recientemente fallecido Suárez y el monarca.
"Para Suárez, estaba clarísimo que el alma de la Operación Armada era el Rey y que nace en Zarzuela", afirma.
El libro también desvela cómo habría sido el enfrentamiento entre Suárez y el Rey que les habría llevado a distanciarse. La siguiente conversación tuvo lugar en la Zarzuela el día después del golpe, según la periodista:
Suárez: “Nos la has metido doblada…Alentando a Armada y a tantos otros, jaleándolos, dándoles la razón en sus críticas, diciéndoles lo que querían oír de boca del Rey, tú mismo alimentaste el malestar militar. Esta situación la has provocado tú”.
"Uno de los dos sobra en este país. Y, como comprenderás, yo no pienso abdicar”, le dijo el Rey a Suárez
El Rey: “¿De qué me hablas?....Me estás amenazando, so cabrón. Tú no puedes retirar tu dimisión como presidente…¿Todavía no te has enterado de que ha sido a ti a quien han dado el golpe?...Políticamente estás muerto. Tienes que saber punto y final a tu historia”
Adolfo Suárez sobra
El libro da a entender que el golpe de Armada contra Suárez se planeó en Zarzuela, y que el 'elefante blanco' habría sido el Rey.
“En vísperas de la Pascua Militar de 1981, el Rey recibió en Baqueira a Alfonso Armada, que le volvió a comer la oreja sobre la situación límite que vivía España. Ese día insistió y le dio una <<solución de Estado>>”, relata Pilar Urbano. “Le plantea que ya tiene una solución, no un golpe de Estado sino un golpe de timón, un golpe de Gobierno”. Según narra el libro, el Rey no espera a volver a Madrid y cita a Suárez inmediatamente en Baqueira. El Rey le diche al presidente que si no hacen algo, los militares se le echarán encima. “No hubo insultos pero sí tuteos y aunque empezó sin crispación, poco a poco se fue calentando. Esa conversación sería el primer choque de una serie encadenada en las semanas siguientes”, explica.
El mensaje de Armada no dejaba lugar a dudas: “Suárez sobra y es urgente poner remedio a esta situación”. El General le pintó al Rey una situación de pregolpe y le informó de que con Suárez fuera del Gobierno podría armarse un gobierno de concentración nacional, al que estarían dispuestos a entrar desde Fraga a Felipe González, y que evitaría el golpe militar. “Por eso don Juan Carlos tiene urgencia para que Suárez visualice que sobra”, explica la autora del polémico libro, que recoge esta otra cita del Rey que tuvo lugar el 22 de enero de 1981 en La Zarzuela:
El Rey: “Yo estoy aquí porque me ha puesto la Historia, con setecientos y pico año. Soy el heredero de 17 reyes de mi propia familia. La cosa está clara: uno de los dos sobra en este país. Y, como comprenderás, yo no pienso abdicar”.