La reforma del Pacto de Toledo que desde el 1 de noviembre permite cotizar hasta dos años a los antiguos, presentes y futuros becarios no será la única que afecte a esta categoría, la más enclenque del mercado laboral. El pasado viernes 18, el Ministerio de Trabajo publicó de manera unilateral un Real Decreto en el BOE “por el que se regulan las prácticas no laborales en empresas”.
Bajo este eufemismo se oculta un programa de nuevas becas de entre tres y nueve meses dirigido a jóvenes de 18 a 25 años, sobre todo a aquellos “con cualificación pero sin experiencia profesional” a través de un convenio entre las empresas y los Servicios Públicos de Empleo. El decreto, así pues, excluye a los centros de formación (universidades, cursos de FP, etcétera) del acuerdo, que no ha sido pactado con los agentes sociales. También establece un salario de 426 euros y no fija las condiciones laborales. “Los becarios podrán hacer jornadas de hasta 40 horas”, deploran desde el área de empleo de Comisiones Obreras.
Sin vinculación contractual
Los sindicatos no ocultan su irritación porque la medida llega por la puerta de atrás y porque lo hace la víspera de unas elecciones. “Es una puerta abierta para cubrir con becarios puestos estructurales en las empresas”, lamentan en CC OO. Esta central y UGT se enteraron el mismo viernes de la iniciativa.
Este medio ha intentado contactar con Trabajo, pero no ha recibido respuesta. El texto del BOE habla de un problema de “inserción laboral” en “personas jóvenes que, aun teniendo una formación académica o profesional acreditada, carecen de experiencia”. El Real Decreto asegura intentar sanar esta situación, pero no compromete al empresario a contratar tras la realización de la beca. “El programa de prácticas no laborales podrá culminar en una contratación laboral”. Podrá.
Las prácticas se desarrollarán bajo la supervisión de un tutor. Es difícil cuantificar el número de becarios que hay España, pero el Gobierno calcula que 30.000 tendrían que haber sido dados de alta en la Seguridad Social desde el primer día de noviembre, algo que no ha ocurrido.