La adjudicación de la caja alicantina intervenida por el supervisor financiero el pasado 22 de julio podría recaer en el Banco Sabadell, la única entidad que ha presentado una oferta vinculante de compra y que tiene vía libre tras el repliegue del resto de candidatos iniciales.
No obstante, las fuentes consultadas inciden en que la falta de interés de Santander, BBVA, La Caixa, Barclays, Ibercaja y el fondo JC Flowers no garantiza que el banco que preside Josep Oliu adquiera finalmente la CAM.
El organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez cuenta con un plazo máximo de diez días para evaluar la capacidad financiera y de gestión de las eventuales ofertas vinculantes, pero desea resolver la subasta con premura.
Según las fuentes consultadas, en el hipotético caso de que Sabadell no se hiciera finalmente con la CAM el Banco de España no sería proclive a trocear la caja alicantina y venderla por partes, dado que esta solución podría suponer un mayor coste de recursos.
El progresivo deterioro financiero de CAM, que registró pérdidas por 1.731 millones de euros en los nueve primeros meses del ejercicio 2011 y una morosidad del 20%, ha congelado el interés comprador de Santander, BBVA y la Caixa.
Aunque desde el Sabadell no confirman que hayan presentado una oferta en firme por la CAM, las fuentes apuntan a que su interés reside en la cobertura ofrecida por el Banco de España en materia de deterioro de activos y liquidez.
Asimismo, comprar la CAM ayudaría al Banco Sabadell a ganar tamaño y acercarse a Popular, su más directo competidor, que le desplazó recientemente de la última operación corporativa en la banca al hacerse con el Banco Pastor.
Por el momento, el organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha inyectado 2.800 millones de capital en la CAM y le ha otorgado una linea de crédito de 3.000 millones para garantizar su liquidez.