El primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, ha pedido este domingo una "respuesta más fuerte" a la crisis económica en la eurozona que de no llegar podría desembocar en la disolución de la Unión Europea.
En una entrevista al diario luso 'Publico', el primer ministro aseguró que el país cuenta todavía con un excedente de 2.000 millones de euros para cubrir sus pagos, pero aprovechó para pedir "solidaridad" en el seno de la UE con aquellos países que no pueden cumplir con sus obligaciones, a cambio de que estos devuelvan el favor haciendo un ejercicio de responsabilidad.
"Necesitamos hallar una respuesta. Si no lo hacemos, claramente podría representar el fin de la Unión Europea", declaró el primer ministro luso. "Es necesaria una respuesta mucho más fuerte. A pesar de varios intentos, no hemos sido capaces de encontrarla", añadió.
Coelho manifestó también que "aquellos países indisciplinados, que requieren de la solidaridad de otros países, deben devolver esa solidaridad ejerciendo responsabilidad" y destacó que cualquier solución a la crisis deberá tener en cuenta la necesidad de una unión política y económica "que complemente a la unión monetaria".
