Con Andalucía como apuesta estratégica y el deseo de ver desalojado no solo del poder sino hasta de Asturias a Francisco Alvarez Cascos, el PP ha recibido los resultados del CIS con satisfacción en el primer caso y con cierto gusto amargo en el segundo. Lo ajustado de unos resultados que podrían dejarles al borde de la mayoría absoluta en tierras andaluzas unido a la necesidad imperiosa que tienen de quedar por encima de Foro en el Principado justifica la intensidad de una campaña fuera de nuestras fronteras en la que ha participado hasta el ex presidente del Gobierno José Maria Aznar.

Un total de 176.245 andaluces y de 89.820 asturianos con derecho a voto residen en el extranjero. Un puñado de papeletas suficiente como para determinar el destino de algún diputado autonómico, aunque el porcentaje de los votantes del CERA (Censo de Españoles Residentes Ausentes) que ejerce el derecho a voto es bastante exiguo. En las últimas elecciones generales el porcentaje de participación fue de un pobrísimo 4,6 del censo emigrante, la más baja de unas generales. Además votó de forma mayoritaria al PSOE, de modo que mientras los socialistas se hundían prácticamente en toda España, ganaban sin embargo en 37 de las 52 circunscripciones electorales frente al PP, que lo hacia tan solo en 14. Aun así, el responsable del PP en el Exterior, Alfredo Prada, ha conseguido ir revertiendo un poco esta situación desde que hace cuatro años Mariano Rajoy le encargara atender esta "laguna" electoral.

De cara a los comicios andaluces y asturianos, Prada ha visitado por ejemplo Colombia, Panamá y Estados Unidos, en este último caso Miami, donde participó en un acto con españoles residentes en esta ciudad junto al ex presidente del Gobierno José María Aznar aprovechando la presencia de éste en el continente americano. No está previsto que Aznar se acerque por Asturias para hacer campaña por la candidata popular, Mercedes Fernández, que se enfrenta a su antiguo vicepresidente y ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos. No lo hizo el pasado 22 de mayo aunque la verdad es que lleva años sin que le reclamen del Principado para participar en un acto electoral.

La actividad del PP también ha ido intensa en Europa. Prada participó en el tradicional acto de pegada de carteles en París, que se repitió en los 27 países en los que los populares cuentan con algún tipo de representación o sede.

Por otro lado, el responsable del PP en el Exterior se reunió la semana pasada con la secretaria de Emigración del PSOE y ex portavoz socialista en el Senado, Carmela Silva, al objeto de modificar el sistema de voto de los residentes ausentes, un sistema que se llama de "voto rogado". Para poder ejercer el derecho al voto hay que inscribirse, y no necesariamente muchos de los que se inscriben acaban votando, entre otras cosas por los retrasos y dificultades en la recepción de la documentación. Por ejemplo, para las últimas elecciones generales se inscribieron para votar 138.031 personas, esto es, un 9,4 por ciento de los residentes en el exterior con derecho a voto aunque luego solo la mitad culminó el trámite.

El objetivo del PP es intentar no dejar escapar ni uno solo de los votos, en el caso andaluz  para hacerse con la mayoría absoluta, en el caso de Asturias para intentar convertir la creación del Foro de Álvarez Cascos en un mal sueño como lo fue para los populares la Unión Renovadora Asturiana (URAS) de Sergio Marqués, la primera vez que se dividió el centro derecha en el Principado, tambien por intervención de Cascos-