Gracias al tremendo éxito de Inditex, Amancio Ortega es desde hace tiempo una de las personas más ricas del mundo. Y como fundador y primer accionista del gigante textil, a lo largo de los años ha querido distribuir parte de su fortuna en obras sociales.
A principios de esta semana, la Fundación Amancio Ortega anunciaba una donación solidaria de 280 millones de euros al sistema público sanitario español. El Gobierno recibirá esta cantidad para comprar diez equipos de protonterapia, una novedosa técnica que emplea protones en lugar de rayos X para destruir las células tumorales ayudando a reducir los efectos secundarios posteriores al tratamiento en los pacientes de cáncer.
Pero el caso más mediático fue en 2015, cuando Ortega puso en marcha un programa dotado con más de 300 millones para la renovación del equipamiento tecnológico en los hospitales públicos, concretamente en el área de diagnóstico y tratamiento radioterápico del cáncer. La incorporación de estos nuevos aparatos, tales como mamógrafos digitales con tomosíntesis y aceleradores lineales avanzados, repercute directamente en la calidad de vida de los usuarios de la sanidad pública.
Coronavirus
Además, y como publicaba recientemente Vozpópuli, donó el pasado año 60 millones para la adquisición de material sanitario con el que combatir el coronavirus.
Desde la Fundación aseguraron que el objetivo de esta acción es "complementar las dotaciones de equipos disponibles para los cuidados necesarios a los pacientes y, simultáneamente, incrementar la capacidad de protección de los propios profesionales sanitarios frente a la exposición al contagio".
Personas mayores
Por otro lado, a finales del 2019, firmó un convenio con la Xunta de Galicia para la puesta en marcha de siete centros residenciales públicos en las principales ciudades gallegas.
La Fundación llevará a cabo la construcción de los inmuebles, con una capacidad de 900 plazas, y los dotará con su equipamiento completo. La inversión estimada inicialmente para el desarrollo de este proyecto es de 90 millones.
Estos centros contarán con servicios innovadores como unidades psicogeriátricas especializadas en el tratamiento del alzhéimer y otras patologías similares y crearán más de 800 empleos directos.
Educación
El empresario también ha mostrado interés por la formación de los estudiantes, al conceder becas para estudiar en Canadá y Estados Unidos. Hasta el 2020, más de 3.500 jóvenes se han visto beneficiados por esta ayuda.
Críticas de Podemos
Sin embargo, no es la primera vez que algunos partidos de izquierdas utilizan estos gestos altruistas para criticarle. Este mismo jueves, la secretaria de Organización de Podemos ha asegurado en redes sociales que Ortega "no es un filántropo", sino un "evasor fiscal".
Lilith Verstrynge juzgaba así la última donación del empresario al Ministerio de Sanidad y calificaba la iniciativa como "campañas de publicidad". "Si le importase el bienestar de los españoles, pagaría todos sus impuestos y no organizaría campañas de publicidad. No necesitamos donaciones a la carta, sino impuestos justos que garanticen los servicios públicos", ha ahondado.
Mientras, el portavoz de la formación morada en el Congreso, Pablo Echenique, ha insistido en esa idea al decir que "habría que ver si, con los impuestos que evitó pagar en España con sociedades pantalla en Malta por sus megayates, esto sale a cuenta o a devolver". "Casi mejor un buen impuesto a la riqueza y más recursos para luchar contra el fraude y la evasión fiscal. Así salimos de dudas", ha proclamado.
