"Nadie entendería que el PSOE llegue a un acuerdo con Bildu para apoyar los Presupuestos Generales del Estado y torpedee los de un Gobierno moderado en Andalucía". De esta forma ha apelado el consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, al líder de los socialistas andaluces, Juan Espadas, en lo que ha sido este martes un llamamiento in extremis para que el principal partido de la oposición retire su enmienda a la totalidad esta semana y, por ende, otorgue su abstención en el posterior debate plenario.
A juicio del también portavoz de la coalición bipartita PP-Cs "algo funciona mal cuando permiten y acuerdan con los herederos de ETA y no lo hacen con un Gobierno moderado", ha reiterado en varias ocasiones a lo largo de su comparecencia de este martes en Sevilla, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, habitual cada martes en el Palacio de San Telmo.
"El Partido Socialista histórico se llevaría las manos a la cabeza", considera el citado consejero del PP sobre la actitud de Espadas: "tendrá que dar muchas explicaciones sobre por qué bendice un acuerdo con los herederos de ETA" y no hace lo mismo con el PP en Andalucía.
Mientras Espadas se lo piensa, frente a las presiones de Ferraz para no respaldar las cuentas andaluzas, está clara la hoja de ruta y el argumentario del Partido Popular de Andalucía: meter toda la presión posible al sucesor de Susana Díaz para que quede retratado como el líder regional de un partido que en Madrid se apoya en Bildu y aquí ni siquiera se abstiene ante un Gobierno que, nada tiene que ver con radicalidad alguna, y que ha pretendido en los últimos meses tender puentes hacia el PSOE, para despegarse del apoyo de Vox como socio parlamentario.
Otro de los ejes del argumentario que emplea ya el Partido Popular desde la administración autonómica es "la pinza entre el PSOE y Vox" que se plasma a día de hoy, de forma indirecta, aunque no haya conversaciones entre ambos partidos, para bloquear las cuentas. Un remedo de lo que sí ocurrió con consenso mutuo en la legislatura transcurrida entre 1994 y 1996, cuando el PP de Javier Arenas y la IU-CA en manos de Luis Rejón convirtieron en un calvario el efímero mandato de Manuel Chaves (sin mayoría absoluta). El ahora expresidente condenado en el 'caso ERE' se vio obligado a disolver el Parlamento a finales de 1995 y llamar a votar el 3 de marzo de 1996. Chaves salió reforzado en las urnas, sin que la alianza a la griega de los dos citados partidos opositores volviera a inquietarle lo más mínimo. La nueva singladura de mar en calma del PSOE andaluz transcurrió con el apoyo inestimable de la muleta del Partido Andalucista, que sumó sus 4 escaños a los 52 de Manolo Chaves, para cuadrar la cifra mágica de 55 (mayoría absoluta).
A pesar de que ya nadie apuesta por un giro de timón del PSOE andaluz, Elías Bendodo ha dejado claro que "el presidente ha dado instrucciones al consejero de Hacienda para que negocie hasta el último minuto", en alusión a las cuatro de la tarde de este miércoles, hora fijada para el inicio del pleno en el Parlamento de Andalucía.
Los populares, que no dan un balón por perdido, si se emplea un símil periodístico, tienen intención de consensuar con Vox y PSOE una salida a este bloqueo incluso durante el desarrollo del debate plenario. No sería la primera vez, en el caso de Vox, que este partido retira una enmienda a la totalidad de los Presupuestos en el último minuto. Conviene recordar que en el caso de la formación de Santiago Abascal, sin estructura orgánica en Andalucía, todo pasa por Madrid y las llamadas telefónicas de última hora que –como ha ocurrido en otras ocasiones– se vean obligados a hacer a la dirección nacional los dirigentes regionales andaluces.
Bendodo ha dicho tener claro que, en el caso del PSOE andaluz, la negativa a respaldar las cuentas se debe a que "a Espadas no le han dejado". Un argumento en línea con lo que viene manteniendo el PP andaluz en privado: "él quería apoyarnos, pero le han temblado las piernas" ante las presiones de Ferraz y el propio Pedro Sánchez, que no quiere darle ningún balón de oxígeno a Moreno Bonilla que pueda contribuir a consolidar, aún más, su talante moderado y centrista, como viene informando Vozpópuli en las últimas semanas.
Por lo que respecta a la negativa de Vox al consenso presupuestario, Bendodo ha explicado que se debe a que, con su bloqueo, pretenden un adelanto electoral en Andalucía, por lo que cree que parten de "un error de base", que es pensar que la no aprobación del Presupuesto "condiciona el calendario electoral". En este punto, Bendodo ha vuelto a insistir en la voluntad de PP y Cs en agotar la legislatura y celebrar elecciones en noviembre de 2022.
Espadas cree que Moreno pretende "dejar caer" el Presupuesto para sus "cálculos electorales"
El secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, ha considerado este martes que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, realmente busca "dejar caer" del Presupuesto de la comunidad para 2022 para "tener manos libres para sus cálculos y estrategias electorales".
En declaraciones a Canal Sur Radio, recogidas por Europa Press, Espadas ha considerado que lo ocurrido en los últimos días, sobre todo, con el "silencio" de Moreno en relación con el audio del vicepresidente de la Junta, Juan Marín, sobre los Presupuestos del próximo año, evidencia que en el Gobierno de PP-A y Ciudadanos (Cs) hay una estrategia de "dejar caer" las cuentas de 2022, "echar la culpa" a los partidos de la oposición y tener "manos libres para las estrategias electorales".
En su opinión, el audio de Marín definió claramente una "estrategia política": "Al PSOE-A ni agua y no se puede dejar que sea un partido político útil", porque el Gobierno está instalado en el "tacticismo político" y en los cálculos electorales".
"Y Moreno no está siendo claro en todo esto", según ha sentenciado Juan Espadas, quien ha criticado que, a un año de que acabe la legislatura, haya abierto ya un debate sobre la fecha de las elecciones andaluzas como si al presidente de la Junta le "sobrara" un año de legislatura.
Ha querido dejar claro que el PSOE-A se ha tomado la negociación de los Presupuestos "con rigor y seriedad", pero parece que estamos ante una estrategia del Ejecutivo autonómico "muy bien medida y pensada para que los Presupuestos caigan".
Espadas ha explicado que su partido entregó al consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo, un paquete de propuestas muy concretas, que rondaban los 762 millones de euros, y lo único que han recibido ha sido el "silencio absoluto". Ha recalcado que es el Gobierno el que tenía que mover ficha y decir si las aceptaba o no. Ha destacado que algunas de esas propuestas se referían a reducir "gasto superfluo" en la Consejería de la Presidencia o a reducir la externalización privada en la sanidad.
Pese a que el consejero de Hacienda diga que la mayoría de las propuestas socialistas están recogidas ya en los Presupuestos de 2022, según Juan Espadas, la realidad es que no lo están por que si estuvieran reflejadas, el Grupo Socialista no habría presentado enmienda a la totalidad a las cuentas del próximo ejercicio.
Ha insistido en que, ante esta situación, el "silencio" de Moreno es muy "revelador" porque es él quien tiene en su mano tanto "desautorizar" a su vicepresidente por las manifestaciones que hace en el audio que ha trascendido como pedir al consejero de Hacienda que modifique una u otra partida para atender las demandas del PSOE-A.
Ha señalado que ha visto "más cómodo" al Gobierno andaluz tratando de llegar a un acuerdo con Vox que con esforzarse en buscar el acuerdo con el PSOE-A.
