Junts per Catalunya encara su proceso de primarias entregado a la estrategia de Carles Puigdemont, que todavía no ha decidido si concurrirá como cabeza de lista en las elecciones previstas para el 14 de febrero, pero impone su férreo mando en el partido desde Waterloo.
Después de la ruptura con el PDeCat, este sábado se votará el reglamento de primarias y las ejecutivas locales del partido y el próximo 28 y 29 de noviembre se elegirá el presidenciable a la Generalitat. En JxCat consideran que su principal activo sigue siendo Puigdemont y públicamente abogan para que pueda ser elegido a distancia en caso de ganar las elecciones.
No obstante, nadie confía en que este escenario se materialice. Si en 2017 ERC no se avino a contradecir al Tribunal Constitucional cuando tumbó la investidura a distancia de Puigdemont, el nuevo estatus del expresidente catalán como eurodiputado en Bruselas le asegura la inmunidad parlamentaria de la que carecía antes. Es decir, nada hace pensar que decida reeditar su promesa incumplida de volver a Cataluña si ganaba las elecciones.
Este vacío para liderar a JxCat en el Parlament ha abierto una pugna entre dirigentes para erigirse como candidato efectivo. La opción favorita tanto de Puigdemont como de las bases del partido es Laura Borràs, actual portavoz en el Congreso. Como en el caso de Quim Torra, Borràs mantendría un nuevo pulso judicial al estar investigada por un presunto fraccionamiento de contratos cuando estaba al frente de la Institución de las Letras Catalanas.
Esta situación procesal de Borràs es su principal fortaleza, pero también su principal debilidad. Dentro del partido hay quien considera que es necesario mantener la línea de enfrentamiento con el Estado: si Borràs también es inhabilitada propiciará un nuevo "conflicto de legitimidades" con España. Otras voces, sin embargo, consideran que el la crisis del coronavirus ha cambiado el paradigma y que el partido debería apostar por un candidato que pueda hacer frente a ERC tras su giro pragmático.
En este caso, pese a que Borràs es una de las dirigentes más fieles a las consignas de Waterloo no sería el perfil más idóneo. Otro de los nombres que suenan con más fuerza es el de Damià Calvet, consejero de Territorio y Sostenibilidad. Calvet es menos popular entre el electorado, pero goza también de la confianza de Puigdemont y no dudó en adherirse a las filas de JxCat una vez se consumó la ruptura con el PDECat.
En esta pugna de liderazgos ha aparecido también el nombre de Jordi Puigneró, el actual consejero de Agenda Digital y Administración Pública que recientemente fue noticia por lanzar una Agencia Especial Catalana. “Puigneró es más valorado entre las bases del partido y es de los pocos que podría hacer sombra a Borràs”, explican fuentes de la formación a Vozpópuli.
El principal problema con Puigneró y Calvet, apuntan las fuentes consultadas, “es que se neutralizan mutuamente”. Ambos son de la misma agrupación de Sant Cugat (Barcelona) y abriría una pugna dentro del partido entre los asesores y cargos de confianza de ambas consejerías.
Tremosa, difusor de 'fake news'
Otro de los dirigentes que están promocionando desde algunas esferas del partido es el de Ramon Tremosa, exeurodiputado y actual consejero de Empresa. Tremosa fue elegido conseller tras la purga a Àngels Chacón por no abandonar el PDECat tras la ruptura de la coalición.
Portada real de Time (izqda), y versión difundida por Tremosa....
Ole te encanta que te den zascas verdad? pic.twitter.com/aWyFDzY9jr
— Мисливець за привидами ?? (@hunterghosts) February 12, 2018
Junto a Borràs, Tremosa sería el candidato más conocido para el gran público. Ha sido uno de los principales hombres en llevar el procés en el Parlamento Europeo y ha protagonizado diversas polémicas en las redes sociales por compartir noticias falsas. Una de ellas fue cuando difundió una foto manipulada de la portada de la revista Time en la que hacía pasar las protestas de Hong Kong de 2014 por una de las manifestaciones de la Diada. Pese a conocerse la falsedad de la información, Tremosa no rectificó.
En otra ocasión, publicó una foto con el ex primer ministro belga asegurando que éste respaldaba el procés separatista contra la deriva del Gobierno de Mariano Rajoy. El propio político belga lo desmintió en la misma red social. Y, pese a su entrega al plan rupturista, no acaba de contar con la confianza de Puigdemont que cree que podría desplazarle una vez alcanzara el liderazgo en la formación.
Queda por ver si los cuatro deciden finalmente presentar su candidatura y si a éstos se suman nuevas candidaturas. Todas ellas, no obstante, bajo la sombra de Puigdemont.
