El alcalde de Lleida y diputado del PSC, Àngel Ros, dejará su escaño en el Parlament por sus discrepancias con la dirección de los socialistas catalanes por su estrategia ante la consulta de autodeterminación en Catalunya.
Así lo han confirmado a Europa Press fuentes cercanas al alcalde, que han precisado que el dirigente socialista hará pública su decisión esta miércoles por la tarde en rueda de prensa. Antes de hacer pública su decisión, se reunirá con otros miembros del sector crítico del partido para comunicar la decisión que ha tomado.
Por su parte el primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha afirmado este miércoles que la renuncia a su escaño en el Parlamento de Cataluña "es un gesto que le honra, porque pone por encima de sus intereses personales el interés colectivo del partido".
Navarro ha hecho estas declaraciones en el Congreso, donde se ha reunido con el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras lo cual ha registrado junto a la portavoz parlamentaria, Soraya Rodríguez, una proposición no de ley para instar al Gobierno a reunir de forma urgente la Comisión Bilateral Generalitat-Estado.
Después de explicar que Ros le ha "comentado que esta tarde anunciará que deja" el escaño, Navarro ha apuntado que, no obstante, "va a continuar siendo alcalde por mucho tiempo", porque es un "excelente alcalde".
Sobre la posición del resto de diputados críticos del PSC en la votación de mañana para reclamar las competencias en materia de referendos, ha sostenido que lo que "todo el mundo tiene que hacer con su voto es seguir las indicaciones que el máximo órgano del partido ha establecido democráticamente".
Cinco diputados críticos del PSC, entre ellos Ros, se reunirán esta tarde para analizar las alternativas ante la votación de mañana en el Parlament, en la que tres de ellos se plantean romper la disciplina de voto del partido y abstenerse de pedir al Congreso el traspaso de competencias a la Generalitat para convocar un referéndum.
A ellos se ha dirigido expresamente Navarro para apelar a la disciplina de voto con el argumento de que así se decidió mayoritariamente, en votación secreta, en la última reunión del Consell Nacional del PSC. "Nadie puede poner en duda el resultado de un procedimiento escrupulosamente de debate democrático dentro de la organización del partido por parte de todos sus representantes", ha enfatizado, convencido de la necesidad de que los representantes del PSC en las distintas instituciones actúen "conforme a esa decisión".
El líder de los socialistas catalanes no ha querido avanzar qué medidas tomará la dirección con los críticos si alguno finalmente rompe la disciplina de voto y ha reiterado su llamamiento a seguir las "indicaciones" del Consell Nacional. Según ha dicho, él siempre ha actuado conforme al criterio de aceptar las decisiones mayoritarias, incluso cuando estaba en minoría.