La Generalitat hace oídos sordos al dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias y convalidará el decreto de las VTC. El llamado popularmente 'tribunal constitucional catalán' ha arrojado un jarro de agua fría sobre los 15 minutos de precontratación, exigidos como mínimo, a las VTC para prestar servicio.
Tanto fuentes de la Generalitat como de los taxistas, el decreto se someterá a su convalidación sin modificar una coma del aprobado a finales de febrero, que tiene además un dictamen de Competencia en su contra.
La Generalitat sacará adelante este documento, que supuso la práctica prohibición de operar a las plataformas con geolocalización de las VTC, como Uber y Cabify en Cataluña. No así a las tradicionales empresas de este sector, cuya precontratación se realiza con un día de antelación.
Pese a que es el segundo revés que recibe el Ejecutivo catalán respecto a este decreto, el primero lo emitió la Autoridad Catalana de la Competencia al considerarlo "discriminatorio", el consejero de Territorio de Cataluña, Damià Calvet, se mantiene firme en su decisión de regular las VTC, ya que, a su juicio, es una actividad distinta al taxi.
Un dictamen no vinculante
El grupo de Ciudadanos en el Parlament, liderado por Inés Arrimadas, solicitó el informe al Consejo, para conocer de primera mano si transgrede la ley. Este dictamen no es vinculante, y tan solo tumba la precontratación de los quince minutos al considerar que "vulnera el derecho a la libertad de empresa" y constituye "una restricción no razonable de éste, según los principios de adecuación, necesidad y proporcionalidad".
Además, ha considerado también inconstitucional la habilitación a los entes locales a aumentar el intervalo mínimo de contratación de los servicios, tal y como ha hecho el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Este ente, presidido por Ada Colau, aprobará este martes el nuevo tiempo de precontratación, que aumentará hasta una hora.