El corazón del municipio madrileño de Las Rozas dejó de latir durante un minuto este sábado. Varias decenas de vecinos acudieron a un homenaje a Sonia, la mujer de 41 años que fue presuntamente asesinada por un menor de 15 años en la bañera. Su novia, con la que llevaba cuatro años, exigió "justicia" porque "no se lo merece nadie" lo que sufrió su pareja.
Los amigos de Sandra, pareja de la víctima, miembros de la conocida peña de Los Bolingas, fueron los encargados de organizar este emotivo acto que reunió a casi medio centenar de vecinos en el epicentro de la localidad. Una concentración presidida por una gran pancarta con la cara de la mujer asesinada y el lema: "Sonia estamos contigo".
Sandra, la novia de la víctima, estuvo rodeada en todo momento de sus amigos de la cuadrilla, que la arroparon en estos duros instantes. Precisamente, sus compañeros repartieron imagenes con el rostro de la víctima para que los presentes se las pusieran en las mascarillas.
El breve homenaje se vivió con una gran emoción y con bonitas palabras de recuerdo hacia Sonia, una chica "alegre" que siempre ha arrimado el hombro ante los problemas. Las escaleras de la plaza del Ayuntamiento fue el lugar escogido para celebrar este minuto de silencio, que ha sido presenciado por Vozpópuli.
Los aplausos cerraron el final del silencio y los presentes acudieron a consolar a Sandra, visiblemente emocionada. "Justicia... no se lo merece nadie", fueron las únicas palabras que llegó a decir la pareja de la mujer asesinada.
Velas, fotos y palos de fregona
Momentos después, los amigos de Sandra caminaron los escasos 100 metros de distancia hasta el número 12 de la Avenida de la Constitución, lugar donde ocurrieron los hechos. Allí, dejaron como homenaje velas, carteles con el rostro de la asesinada y palos de fregona, en relación a su oficio de limpiadora. Un sencillo y emotivo acto de recuerdo que acabó con abrazos y lágrimas.
Estuvieron presentes, a título personal, varios concejales del equipo de Gobierno de Las Rozas. El primer teniente de alcalde, Gustavo Rico, aseguró a Vozpópuli que su objetivo era acompañar a los vecinos en estos momentos de "dolor". Para Rico este municipio es "tranquilo" y condenó los terribles acontecimientos. El edil también resaltó la importancia de las cámaras de seguridad que han "ayudado" a esclarecer este suceso.
Ingresó en un centro de menores
Precisamente, este viernes un juez de Menores de Madrid acordó el ingreso en un centro de régimen cerrado al joven, marroquí de 15 años, que presuntamente asesinó a Sandra. Este adolescente vivía con la víctima, su abuelo y un hermano en el piso 3B.
Sonia R.M., llevaba varios años haciendo vida en la localidad madrileña de Las Rozas. Se había separado hace varios años y tenía una niña de 9 años. Fue camarera de un restaurante del municipio y también trabajó de auxiliar de limpieza en una residencia y centro de día. Por desdicha de la vida, después de Navidad, se instaló en la casa de un conocido de 64 años. El pasado miércoles uno de los nietos de este hombre presuntamente acabó con su vida tras asfixiarla mientras se daba un baño.
Esta familia llevaba solo seis meses en esta vivienda y no eran muy conocidos por los vecinos. Solo se cruzaban con ellos cuando bajaban las escaleras. Por motivos que se desconocen, el abuelo aceptó que esta mujer se asentara en una de las habitaciones de la casa. No pagaba alquiler y en el contrato de arrendamiento solo figuraba el hombre. En algunos establecimientos cercanos sí que se acuerdan de Sonia. "La veíamos tomar algo con sus amigas. Nunca acompañada de este individuo", explican.
El menor de los nietos, de 13 años, llegó del colegio y encontró el cadáver de la mujer en la bañera. El agua estaba llena y un cable cerca lo que hizo pensar a los sanitarios que se había quitado la vida. El cuerpo estaba rígido. Llevaba varias horas fallecida.
El abuelo dijo que no eran pareja
Sin embargo, las pesquisas policiales apuntaron hacía el otro nieto, de 15 años, que había abandonado el domicilio de forma apresurada con una mochila negra. Gracias a este detalle fue localizado por las cámaras de seguridad del Ayuntamiento de Las Rozas y la Policía Local hizo un trazado de su recorrido cuando salió de casa.
El joven fue hallado dos horas después, cerca del lugar de los hechos en el núcleo urbano del municipio. Los agentes que le encontraron se dieron cuenta de que tenía marcas en los brazos, lo que hace pensar que la víctima intentó defenderse del ataque.
El abuelo de los menores dijo a los agentes que Sonia no era su pareja pero que llevaba conviviendo en una habitación con ellos desde hace unos dos meses, poco después de Navidad. Todo apunta que el joven sufrió un brote psicótico en el momento del suceso.
Tres días después los amigos de esta mujer aún buscan explicaciones. No acaban de entender lo sucedido en el centro de este tranquilo municipio. Las respuestas nunca serán suficientes para Sandra.