Guardamar del Segura registró en la noche de este viernes una nueva agresión sexual por un magrebí acogido en el hotel Parquemar de la localidad. Fuentes policiales señalan que el individuo se dedicó a tocar sin consentimiento a varias chicas, un suceso que terminó con un aviso a la Guardia Civil, que se personó en el lugar para llevar a cabo la detención.

Además, estas mismas fuentes señalan que hace dos noches, un grupo de entre 10 y 15 inmigrantes ilegales hospedados también en el hotel Parquemar se dedicaron a armar jaleo por la noche en el pueblo y reventar varios retrovisores de vehículos aparcados en la calle. Este suceso ocurrió sobre las 4.30 de la mañana, lo que denota que el toque de queda impuesto por la ONG que los tutela, CEPAIM, no está evitando que salgan a la calle durante las horas nocturnas.

Esto es algo que ya advirtió el alcalde de la localidad, José Luis Sáez, quien aseguró a este diario que a las 23.30 se cierran las puertas del hotel hasta las 6.00, por lo que aquellos inmigrantes acogidos que quieran salir del establecimiento a las 23.25 y no regresar hasta la mañana siguiente tienen la libertad absoluta de hacerlo.

Además, la patrullera de la Guardia Civil prometida por las autoridades del pueblo para custodiar el hotel sigue sin estar operativa. Desde el Ayuntamiento sostienen que esto está solicitado desde hace semanas, pero que la Comandancia del Instituto Armado no ha tomado la decisión de colocar el vehículo en los exteriores del hotel.

Esta agresión sexual se suma a los distintos delitos cometidos por un grupo de inmigrantes alojados en el hotel que llegó hace dos meses. En la lista de sucesos se encuentra otra agresión sexual, robos menores, dos palizas -a un joven de 19 años y un portero de un pub- y una reyerta entre los inmigrantes alojados en el hotel.

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