En un reciente boletín informativo, el Centro de Farmacovigilancia de Navarra ha revelado la detección de 11 casos de hipertricosis, conocida como 'síndrome del hombre lobo', en bebés lactantes cuyos cuidadores estaban utilizando minoxidil, un medicamento tópico comúnmente empleado para tratar la alopecia androgénica. Uno de estos casos ocurrió en Navarra, lo que motivó una revisión exhaustiva de los registros nacionales e internacionales sobre incidentes similares.
El primer caso fue notificado en abril de 2023, cuando un bebé de Navarra desarrolló un crecimiento progresivo y anómalo de vello en la espalda, piernas y muslos durante dos meses. Ante la ausencia de patologías subyacentes o medicamentos administrados al menor, los especialistas centraron su atención en los cuidadores.
La investigación reveló que el padre del bebé utilizaba minoxidil al 5% para tratar la alopecia y, coincidiendo con el inicio de los síntomas, había estado de permiso laboral cuidando al menor. Tras suspender el uso del fármaco y evitar el contacto entre el bebé y las zonas tratadas, los síntomas remitieron completamente.
A raíz de este hallazgo, el Centro de Farmacovigilancia de Navarra investigó en la base de datos del Sistema Español de Farmacovigilancia (FEDRA), identificando otros seis casos similares en lactantes expuestos a cuidadores que usaban minoxidil tópico. Después, una búsqueda en Eudravigilance, la base de datos de farmacovigilancia europea, arrojó tres casos adicionales y una revisión bibliográfica permitió encontrar un caso más documentado. En total, se identificaron 11 casos con características comunes: bebés lactantes desarrollando hipertricosis tras el contacto con cuidadores que aplicaban minoxidil en el cuero cabelludo.
La piel infantil: un factor determinante
Los especialistas señalan que la piel de los bebés es especialmente vulnerable debido a su menor grosor y una mayor proporción de superficie corporal en relación con su peso, lo que facilita la absorción de sustancias aplicadas tópicamente. En estos casos, se sospecha que el minoxidil se transfirió a los lactantes mediante contacto directo o indirecto, incluyendo la posibilidad de ingestión accidental al llevarse las manos a la boca tras tocar áreas tratadas del cuidador.
La hipertricosis en lactantes no solo resulta alarmante visualmente, sino que también puede desencadenar una serie de pruebas diagnósticas para descartar posibles problemas endocrinos, lo que genera estrés tanto en los pacientes como en sus familias. Además, el informe advierte que la exposición involuntaria de un grupo vulnerable a un medicamento no indicado es un riesgo para la salud pública.
Tras la revisión de los casos, el Centro de Farmacovigilancia de Navarra propuso en mayo de 2023 incluir la hipertricosis en lactantes como una señal de riesgo en el Sistema Español de Farmacovigilancia. Esta propuesta fue finalmente validada por unanimidad y confirmada a nivel europeo en junio de 2023.
El Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia europeo (PRAC) recomendó en junio de 2024 incluir una advertencia específica en la ficha técnica y el prospecto de los productos que contienen minoxidil. Esta advertencia señala el riesgo de hipertricosis en lactantes por exposición accidental al medicamento, instando a los usuarios a tomar precauciones para evitar el contacto.
El Centro de Farmacovigilancia subraya la importancia de que los cuidadores de bebés sean conscientes de los riesgos asociados con el uso de medicamentos tópicos como el minoxidil. Recomienda extremar las precauciones, incluyendo lavarse las manos tras la aplicación del producto y cubrir las áreas tratadas para evitar así cualquier contacto directo con la piel de los bebés y los recién nacidos.