"Si alguien está jugando con las cartas marcadas es la Fiscalía, que utiliza una información confidencial para hacer oposición al PP". Con estas palabras, Alberto Núñez Feijóo ha reaccionado este jueves a la teoría que Pedro Sánchez expuso ayer ante la prensa en el tradicional almuerzo navideño en el palacio de la Moncloa: que el PP "juega con cartas marcadas" porque maneja información privilegiada de los jueces. A juicio del líder de la oposición, estas acusaciones son "gravísimas" y obedecen más que nada a una situación de pánico por la cantidad de escándalos que le acechan: "Está desesperado".
El intento de Sánchez de politizar la justicia, según Feijóo, es un dislate. Un atentado directo contra el sistema constitucional vigente. "Le pediría al presidente del Gobierno que fuese un poco más responsable. No vale todo. No vale destruir la separación de poderes en nuestro país y no vale destruir la democracia española, y que el máximo responsable de ese ataque a la democracia española sea nada más y nada menos que el presidente del Gobierno de España", ha censurado a su llegada en Madrid a XXI edición de los Premios Joven Empresario, donde ha intervenido esta mañana.
Lejos de rebajar las insinuaciones sobre el devenir de las causas judiciales que salpican a Sánchez en esta legislatura, Feijóo ha insistido en la tesis de que lo que está por llegarle al jefe del Ejecutivo es todo "un vía crucis judicial". Porque cada día, ha incidido, "van a comparecer en el juzgado personas relacionadas con su entorno y su partido". Desde Aldama, Koldo García... "hasta su propia mujer o la asesora de Moncloa".
Un vía crucis que, de ser tal como Feijóo lo describe, ha contado hoy con una estación clave en el Tribunal Supremo, donde José Luis Ábalos ha acudido a primera hora para declarar por primera vez como imputado en el llamado 'caso Koldo'. El que antaño fue hombre clave de Sánchez, tanto en Moncloa como en Ferraz, se enfrenta a una investigación judicial por cuatro delitos. Entre ellos el de pertenencia a organización criminal y malversación de fondos públicos. Y la incógnita de Feijóo sigue siendo la misma: ¿por qué Sánchez cesó a Ábalos? "Todavía los ciudadanos no saben por qué. ¿Qué información tenía para cesarle?", se ha preguntado. "Todo parece indicar que sabía muchas cosas y que las tapó todas", ha opinado el presidente popular en unas declaraciones improvisadas a los medios.
Al hilo del supuesto complot entre los jueces y su formación política -desmentido por tres asociaciones judiciales distintas-, Feijóo ha denunciado: “Si hay alguien que ha intentado politizar la justicia es el propio presidente del Gobierno con el nombramiento del fiscal general del Estado y con el nombramiento de los miembros del Tribunal Constitucional”. Por su parte, se ha comprometido en seguir “defendiendo la independencia judicial” y ha recalcado que él no va a “atacar” la seaparación de poderes. “Como hace el Gobierno y sus socios con independencia de que en 2018 se presentara una moción de censura por una sentencia judicial”. Moción de censura que, por cierto, fue José Luis Ábalos el encargado de defender en el Congreso.
