Tú a Sanxenso y yo a Segovia. Como en aquella mítica película de los 90 donde separan a dos hermanas (una a Londres y otra a California), Felipe VI y su padre, Juan Carlos I, estarán separados en el regreso de este a suelo español tras cerca de dos años de 'exilio'. Mientras que el Emérito acude el viernes 20 de mayo a Sanxenso (Pontevedra) al comienzo de la regata trofeo InterRías del circuito Copa España 2022 de clase 6mR, donde participa Bribón, el barco que capitanea, su hijo acudirá a un acto del Real Instituto Elcano en el Palacio Real de la Granja de San Ildefonso, Segovia.
El Real Instituto Elcano, uno de los think tanks más relevantes a nivel nacional, celebra con carácter anual la reunión de su Consejo Científico. La institución ha confirmado que el Consejo tendrá lugar el mismo viernes 20 de mayo a las 11 de la mañana y estará presidido por Su Majestad el Rey. El Consejo Científico es el principal órgano consultivo del Real Instituto Elcano, y asesora a los directivos e investigadores del mismo a fin de garantizar el eficaz cumplimiento de sus fines fundacionales.
Este órgano está compuesto por destacadas personalidades españolas y extranjeras, procedentes del ámbito académico, político, diplomático, empresarial, y mediático, que tienen en común un acreditado conocimiento de las Relaciones Internacionales. Mientras Felipe VI preside esta reunión, el Emérito atenderá a la regata. No se sabe todavía si acudirá como espectador o como participante.
Dispositivo de seguridad
Habrá que esperar, por tanto, para presenciar el reencuentro entre el Rey y su padre. En cualquier caso, el regreso a España de Juan Carlos tras dos años ha generado gran expectación y, como ha adelantado este diario, una gran movilización de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Para garantizar el blindaje al Emérito, se van a movilizar recursos de Casa Real, el Ministerio del Interior y la Policía Local. Los desplazamientos por carretera del exmonarca y su presencia en el Club Náutico son dos puntos clave para el dispositivo.
En Abu Dabi, Juan Carlos I disponía de dos coches a su servicio y de otros dos que aportaba el país emiratí. En su visita a Sanxenxo, sin embargo, el dispositivo puede ser aún mayor. Aun así, estará lejos de la delegación de alrededor de 300 personas que acompañan estos días al emir de Qatar, Al Thani, en su visita de Estado a nuestro país.
exsenderista
Si el emérito dice que viene de forma particular a visitar a sus amigos. ¿Por qué no contrata su propio equipo de seguridad?¿Por qué gasta recursos de un país del que "tuvo que irse" por su indecente conducta? Creo que ha desperdiciado una oportunidad de mostrarse con un poco de consideración a su ciudadanía.