La Policía Municipal de Madrid ha detenido al organizador de una fiesta ilegal a la que asistían menores en un piso de la capital por cerrar todos los accesos del edificio e impedir salir a unos setenta jóvenes, que finalmente fueron rescatados por los agentes y los bomberos.
Según ha informado la Policía Municipal, el suceso ocurrió sobre la una de la madrugada del pasado domingo, cuando se recibió un aviso porque en la quinta planta de un edificio de oficinas de la calle María Tubau del distrito de Fuencarral se estaba celebrando una fiesta ilegal con menores.
Cuando los agentes llegaron el responsable y organizador de la fiesta -Jorge C.G.- cerró todos los accesos para impedir la entrada de los policías, prohibiendo también que salieran los jóvenes.
Desde la calle se escuchaban gritos y golpes pidiendo auxilio que procedían de la planta en la que se celebraba la fiesta
La madre de una de las menores explicó a los agentes lo que su hija le relataba por teléfono desde el interior, donde los jóvenes quedaron retenidos contra su voluntad.
Desde la calle se escuchaban gritos y golpes pidiendo auxilio que procedían de la planta en la que se celebraba la fiesta, mientas el dueño seguía sin abrir, por lo que los agentes decidieron entrar por una ventana y, desde ese lugar, abrir la puerta del garaje para facilitar el acceso al edifico al resto de servicios municipales.
Finalmente los bomberos tuvieron que intervenir y descerrajar la puerta del local en el que se celebraba la fiesta para desalojar a los menores. Varias dotaciones de Samur y Policía Municipal atendieron a los jóvenes, muchos de ellos muy nerviosos por lo ocurrido.
La fiesta había sido organizada sin ningún tipo de autorización, con un coste por entrada de seis euros y en un local que no contaba con salidas de emergencia ni ninguna otra medida de seguridad, ha precisado la Policía Municipal. En su interior los agentes comprobaron que había una luz tenue debido a la falta de suministro eléctrico, mesas repletas de botellas de alcohol y restos de tabaco.