El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha llamado a declarar a decenas de aspirantes a la Guardia Civil que plantearon un recurso contra la prueba de ortografía de acceso al cuerpo. Los opositores protestaban por la dificultad de las pruebas y planteaban que algunas de las preguntas recogían términos o hacían referencia a expresiones que no existían.
El origen de la polémica se fundamenta en las pruebas de acceso a las que casi 30.000 aspirantes se presentaron el pasado mes de julio. Diferentes asociaciones de la Guardia Civil canalizaron las protestas de los opositores, que consideraban que el examen contenía irregularidades que afectaban a su candidatura; principalmente, que se preguntaba por términos de escaso uso coloquial o que no figuraban en la RAE.
La Jefatura de Enseñanza de la Guardia Civil desestimó el recurso de alzada que presentó un grupo de aspirantes contra dicha prueba de ortografía. Ante esta respuesta, los opositores presentaron un recurso contencioso-administrativo en el TSJM contra esta decisión.
En un anuncio publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), la sección sexta de la sala de lo contencioso-administrativo del TSJM ha llamado a comparecer a 48 aspirantes que presentaron el recurso. A fecha de este jueves, 5 de marzo, da un plazo de nueve días para presentarse en dependencias judiciales.
Por su parte, la Jefatura de Enseñanza de la Guardia Civil siempre ha defendido la legalidad y la coherencia de los exámenes realizados a los 30.000 aspirantes. Tampoco admite que la prueba a la que se enfrentó la segunda tanda de examinados -se les dividió en dos días consecutivos, sábado y domingo- fuese más complicada que la de la primera. Ni que hubiese filtraciones antes de que acabase ninguna de las pruebas.
Reproches, todos ellos, que de un modo u otro, han planteado parte de los opositores. La Justicia tendrá que determinar el recorrido que esta protesta debe tener en los tribunales.