La tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus no es necesaria para menores de 60 años, ni siquiera aunque sean sanitarios o sociosanitarios. Así lo contemplan los inmunólogos consultados por este diario después de que este miércoles el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) sorprendiese con un informe, claramente influido por la pésima situación con la covid que viven países como Austria o Alemania, donde recomendaba una tercera dosis en mayores de 18 años, con especial prioridad para los mayores de 40.
Pongámonos en situación. Austria ha superado una incidencia de 2.000 casos a 14 días, una cifra a la que España ni siquiera se acercó tras la tercera ola de coronavirus, aquella que azotó nuestro país después de la Navidad de 2020 y que nos hizo rozar una incidencia de 900. Según los datos que recoge el Ministerio de Sanidad, Austria está registrando cerca de 40 muertes por covid diarias, más que España a pesar de tener 4 veces menos población.
La situación de Austria es paradigmática, y es el reflejo de una Europa que está padeciendo más que nunca el ataque de un virus que ha encontrado en lugares como Países Bajos, Alemania o Eslovaquia el caldo de cultivo perfecto para expandirse y matar: relajación de las medidas no farmacológicas (mascarillas y distancia), cifra de vacunación insuficiente y condiciones climáticas óptimas para el patógeno.
En España parece que se hace raro no ir a la cola de Europa en algo, ser los peores también en contagios y muertes por covid, pero en esta ocasión no ha sido así. Sin embargo, tal como apuntan los especialistas en Inmunología consultados por Vozpópuli, la psicosis originada en los países del norte de Europa se está extendiendo al resto de las regiones y ha llegado hasta el ECDC.
"Los países también deben considerar una dosis de refuerzo para todos los adultos mayores de 18 años, con prioridad para las personas mayores de 40 años", reza el informe del organismo europeo, que también pide reforzar las medidas no farmacológicas hasta después, incluso, de las vacaciones de Navidad (mascarillas, distancia de seguridad, limitación de aforos...).
¿Hace falta una tercera dosis?
El presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), Marcos López Hoyos, considera que el documento de la ECDC en lo que respecta a la dosis de refuerzo muestra una clara alienación con Alemania: "En España tenemos buenos datos. La visión del ECDC es más global. A día de hoy estamos en una situación privilegiada. La evidencia sobre si es necesaria una tercera dosis no es completa. Los países del norte de Europa se están adelantando aplicando un punto de vista de Salud Pública, más que de Inmunología. Yo creo que, más importante que una tercera dosis, sería óptimo que salgan cuanto antes otros tipos de vacunas que nos permitan inocular una pauta heteróloga que es la que creo que marcará la diferencia en la pandemia".
López Hoyos insiste en que "la gente hospitalizada son personas no vacunadas de entre 50 y 60 años. Faltan 4 millones de españoles de esa edad por vacunar y es donde tenemos que centrarnos, más que en la tercera dosis".
Una medida desesperada
En una línea similar se expresa el inmunólogo Alfredo Corell, que afirma que la propuesta de vacunar con tercera dosis a mayores de 18 es "desesperada" y carece de evidencia científica. "Esta decisión responde a las incidencias que tienen algunos países europeos. Están apostando a poner terceras dosis para llegar con la situación lo más controlada posible a Navidad. Sinceramente, no es la solución. Es mucho más importante llegar a los no vacunados. Este paso es una medida desesperada para intentar parar la ola. La culpa de lo que está pasando en estos países es de los no vacunados".
De la misma forma, cree que no hay evidencia para poner la dosis de refuerzo a todos los sanitarios y sociosanitarios, como pactó la Comisión de Salud Pública en su última reunión. "Están más expuestos pero si tienen inmunidad, ¿por qué poner tercera dosis? Se está haciendo una actuación masiva, cuando se podría hacer quirúrgica".
Corell señala que "hay muchas dosis fabricadas y desesperación porque no se controla la pandemia en muchos países. Pero estas dosis de refuerzo no responden a evidencias científicas. Un estudio de Israel apunta que con el tiempo, las vacunas de ARNm pierden protección. Pero las conclusiones del estudio no me parecen lo suficiente contundentes para establecer una tercera dosis en la población general. Si pasados 4 meses se perdiera la eficacia de las vacunas, en España estaríamos ya colapsados".
Si pasados 4 meses se perdiera la eficacia de las vacunas, en España estaríamos ya colapsadosAlfredo Corell, inmunólogo
Este especialista cree que tenemos que asumir que estamos en la estación del coronavirus, y que se debe incorporar como una enfermedad estacional más. "Veo que aumenta la incidencia pero que no trasciende a los hospitales, así que no entiendo las prisas por poner la tercera dosis".
