El juez del 'caso Koldo' da el primer paso para citar como imputado a José Luis Ábalos. El magistrado de la Audiencia Nacional se ha dirigido al Congreso de los Diputados para preguntar si el exministro de Transportes está aforado en su condición de parlamentario. En su providencia, a la que ha tenido acceso Vozpópuli, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional solicita a la Cámara Baja que se expida "certificación acreditativa" de la condición de diputado de Ábalos.
El juez actúa de esta forma tras recibir un nuevo informe de la Guardia Civil, diferente al incorporado esta pasada semana sobre el comandante Rubén Villalba. El movimiento se entiende como un paso previo a la citación del exministro del Gobierno de Pedro Sánchez. De considerar que hay indicios sobre Ábalos, el juez tendría que elevar una exposición razonada al Tribunal Supremo, que es el competente para investigarle por su condición de aforado.
El nuevo informe de la UCO desvela, entre otras cosas, algunos de los trabajos que el comandante de la Guardia Civil, Rubén Villalba, realizó para los cabecillas de la trama. Entre algunos de estos asuntos, destaca la petición que Koldo García, asesor del ministro de Transportes en esa época, le hizo al guardia civil a fin de averiguar si José Luis Ábalos y el presidente del Gobierno tenían pinchados sus teléfonos.
"En una ocasión llegó a pedirme si el teléfono del presidente del Gobierno y el que fue ministro de Fomento José Ábalos estaban pinchados, a lo que se dijo que no podíamos hacer nada", reza una conversación que la UCO atribuye al comandante de la Guardia Civil. Y es que, según se desprende de varias conversaciones recogidas en el informe, Víctor de Aldama y Koldo García se tomaron muchas molestias en proteger sus comunicaciones y Rubén Villalba era el hombre perfecto para proporcionarles dicha protección.
El comandante proporcionaba a la trama líneas de teléfono seguras
El escrito elaborado por la unidad del Instituto Armando hace hincapié en que la seguridad de las comunicaciones telefónicas suponía "uno de los aspectos más importantes" para el que fuese dueño del Zamora CF. En consecuencia, gracias a los dispositivos proporcionados por Villalba logró poder comunicarse con otros miembros de la trama "de forma segura y al margen de una eventual acción policial/judicial".
La labor de Villalba era gestionar esos móviles "cambiándoselos" a los integrantes de la trama y "destruyendo los antiguos, aumentando por tanto la protección que se les brindaba a los investigados". De igual modo, según concluyen los investigadores, el exministro llegó a utilizar algunos de los dispositivos favorecidos por el agente.
"Durante su periodo en el Gobierno y muy raramente fuera de esta posición siempre nos ha pedido telefonía básica, no Smart phone, para hacer sus llamadas. En alguna ocasión llegué a ver al ex Ministro Ábalos con alguno de los dispositivos proporcionados por nosotros", llegó a asegurar el comandante en alguna de las conversaciones intervenidas.
A cambio de estos trabajos de seguridad, entre los que también se incluía la dotación de información confidencial -sobre investigaciones policiales o datos de terceros en la base de datos de la Guardia Civil-, Villalba recibió varios pagos en efectivo procedentes de la trama. Según el rastreo de sus cuentas, sus ingresos en metálico sufrieron un considerable aumento entre los años 2021 y 2023, años en los que se forjó su relación con Víctor de Aldama.
La UCO concluye que el comandante, destinado en 2023 a la Embajada de España en Venezuela, recibió abonos por un valor de 145.049 euros de origen desconocido entre 2017 y 2023. Asimismo, cabe destacar que la mayor parte de estos ingresos corresponden al "período que abarca los pagos acreditados de Aldama a Rubén (2021-2023)", en el cual estos "abonos concentran el 60,75% del total, sumando 88.119,00 €".