La Policía Nacional ha desarticulado en España un entramado que se dedicaba al tráfico de medicamentos rumbo a Marruecos que se empleaban en el país vecino para la fabricación de Karkubi, una droga hecha con una mezcla de psicotrópicos con hachís, alcohol o pegamento. La operación ha culminado con la detención de ocho personas en las provincias de Lérida, Madrid y Alicante, entre ellas el líder de la organización, y la intervención de 500.000 pastillas, tanto en territorio nacional y el reino alauí, con la intervención directa de la DGSN marroquí, el Centro de Cooperación Policial de Tánger MED de la DCI y el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria.
La intervención ha culminado con la aprehensión en España de 200.000 pastillas de la familia de las benzodiazepinas, la mayor intervención de fármacos jamás llevada a cabo en nuestro país. Las pesquisas arrancaron en junio de 2021 tras un intercambio de información entre autoridades españolas y marroquíes, después de que desde el reino alauí se informase de la investigación sobre un furgón de alquiler con matrícula marroquí, arrendado por una empresa de transporte con domicilio en Lérida, en cuyo interior localizaron 4.477 gramos de cocaína y 361.672 comprimidos de fármacos psicotrópicos.
“A partir de ese momento, los agentes determinaron la existencia de una organización criminal, con fuertes raíces en la ciudad de Lérida, presuntamente dedicada a la obtención de distintos medicamentos de la familia de las benzodiacepinas para la posterior fabricación, en Marruecos, de una droga conocida como Karkubi”, señala la Policía Nacional.
De España a Marruecos
Las investigaciones de los agentes determinaron que los individuos radicados en España obtenían los medicamentos con la falsificación de recetas médicas, empleando para ello a individuos con antecedentes policiales y adicciones a los estupefacientes, ya que los fármacos son recomendados para personas que sufren esta situación.
Según la Policía Nacional, “una vez conseguidos los medicamentos los enviaban a Marruecos, donde se ubican los laboratorios clandestinos de fabricación de Karkubi”: “Esta droga, cuyas cápsulas son conocidas en el mercado negro como cartucho, recarga, ampolla roja o Guadalupe, se obtiene mezclando medicamentos psicotrópicos con hachís, alcohol o pegamento, y puede provocar alucinaciones y psicopatías”.
La operación policial se ha explotado en cuatro fases. La primera, a principios de septiembre de 2021, tuvo lugar en Madrid, en los almacenes centrales de una empresa de mensajería. Los investigadores detectaron que uno de los miembros del entramado, que trabajaba en la compañía pero desde una oficina de Lérida, había enviado dos hornos industriales con 348 botes de pastillas en su interior, que contenían un total aproximado de 80.000 comprimidos y estaban camuflados mediante la apariencia de un conocido medicamento. El destino final del envío era Ceuta y desde ahí estaba previsto su transporte final hasta Casablanca, Marruecos.
La segunda fase fue en el puerto francés de Sète, a mediados del mismo mes de septiembre, tras detener a un individuo marroquí que pretendía viajar hasta Nador con 70.000 pastillas del grupo farmacológico de las benzodiacepinas, que trasladaba en un vehículo de matrícula española.
La cuarta, en el mes de noviembre, se centró en la identificación de varios transportistas que trabajaban para una parte de la organización, afincada en Lérida. Los individuos cargaron 62.000 comprimidos de un medicamento ansiolítico en un vehículo para su comercialización ilegal en Marruecos, pero los agentes los detuvieron antes de que pudieran culminar el traslado.
Todas estas intervenciones estaban vinculadas entre sí y, en diciembre de 2021, se explotó la última fase de la operación, con tres registros domiciliarios en Lérida y otro en Alicante, en la que se detuvo a cinco personas, entre ellas el líder de la organización, “un individuo de origen marroquí en cuyo domicilio se intervinieron 27.000 euros en efectivo y 300 pastillas”, informa la Policía.
