La situación de caos en Barajas está lejos de llegar a su fin. A principios de esta semana un total de 366 inmigrantes esperaban en tres salas a que se resolviese su solicitud de asilo. Los agentes de la Policía Nacional están desbordados en prestar atención a estas personas. Algunos de estos funcionarios han sufrido la picadura de chinches por la suciedad de estos alojamientos temporales. En un primer momento la concentración de personas con pasaporte de Kenia provocó esta situación pero ahora en sus instalaciones han llegado inmigrantes senegaleses y marroquíes, según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
Hay tres salas habilitadas en Barajas para estas personas. En la Sala 4 hay 170, en la Sala 3 pernoctan 110 asilados y 4 inadmitidos y en la Sala 2 conviven 86 mujeres y niños. Un total de 366 personas siguen hacinadas en malas condiciones de salubridad.
En las siguientes imágenes conseguidas por este diario puede verse la situación en la que malviven los solicitantes de asilo en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
