El Ayuntamiento de Madrid, a través del área de Desarrollo Urbano Sostenible, ha decidido tomar el control y "secuestrar" temporalmente la concesión interviniendo a la empresa Dragados la gestión del mantenimiento de nueve túneles tras las constantes incidencias ocasionadas por filtraciones en varias de estas infraestructuras, han informado fuentes municipales a Europa Press.
Dragados, a su vez, ha interpuesto recurso contencioso-administrativo y ha solicitado la suspensión de las resoluciones administrativas dictadas. Los juzgados de la jurisdicción contencioso administrativa nº 6 y 23 han dictado una medida cautelarísima de suspensión concediendo al Ayuntamiento un plazo para justificar la aplicación de secuestro temporal de la concesión.
En las últimas semanas y como consecuencia de la presencia de filtraciones de agua no reparadas o reparadas por "falta de diligencia por el concesionario", los responsables de seguridad de los túneles han procedido a ordenar el cierre parcial o total y por determinados períodos de tiempo de hasta nueve túneles.
"El concesionario, a pesar de los reiterados requerimientos de la Administración y las órdenes de trabajo de los técnicos municipales, no ha ejecutado las obras de reparación necesarias para permitir el funcionamiento normal de los túneles en condiciones de seguridad", indican fuentes municipales.
Medida jurídica excepcional
Ante la "inactividad del concesionario y ante la grave perturbación al tráfico y a la movilidad de la ciudad derivada del cierre de estos pasos subterráneos que ha afectado no solo a los ciudadanos sino al funcionamiento de los servicios esenciales de la ciudad", el área de Desarrollo Urbano Sostenible ha optado por la aplicación de "una medida jurídica excepcional prevista, para una situación de emergencia" como la descrita tanto en el Pliego de Condiciones que regula el contrato de concesión como en la normativa administrativa vigente.
Se trata del "secuestro puntual y temporal" de la concesión en los nueve túneles afectados para tomar el control de la situación y proceder a la reparación inmediata de las filtraciones producidas. Para aplicar esta medida ha iniciado los debidos expedientes, uno por cada túnel, concediendo a la empresa Dragados un plazo para la ejecución de las obras de reparación.
Emergencia de la ejecución
Cumplido ese plazo y verificado que la empresa concesionaria "no había ejecutado las actuaciones a las que está obligada" se ha dictado un decreto declarando la emergencia de la ejecución y la resolución de secuestro temporal de la concesión para realizar las obras de reparación necesarias y permitir la apertura de los túneles y su funcionamiento en condiciones de seguridad.
Las mismas fuentes señalan que la mayor parte de las reparaciones, consistentes en la conducción del agua filtrada por canaletas hasta el sistema de drenaje, se podía realizar como máximo en 72 horas y a un coste mínimo.
Nueve túneles
Los túneles afectados son el de Plaza Castilla (en ambos sentidos de la circulación); túnel de Pío XII-tubo norte (sentido Monforte de Lemos y Sinesio Delgado); túnel de Pío XII-tubo sur (sentido avenida de Burgos y M-30); o el de José María Soler (tramo sentido Gran Vía de Hortaleza). Este túnel estuvo cerrado desde el 6 de febrero a las 3.25 horas y hasta las 18.20 horas del mismo día, plazo en el que la concesionaria terminó los trabajos instalando canaletas de recogoda de agua y se pudo reabrir.
Al listado se une el túnel de Sor Ángela de la Cruz (sentido Villamil); Sor Ángela de la Cruz (sentido Castellana); túnel de Azca (salida a Capitán Haya); Azca (entrada por la calle Basílica y anillo interior) y el túnel de la Puerta de Toledo (sentido Ronda de Segovia).
Desde el Ayuntamiento explican que las filtraciones de agua suelen ser habituales en las infraestructuras subterráneas. Además se ha dado la circunstancia de que algunas de las producidas en los túneles afectados fueron agravadas por roturas de tuberías del Canal de Isabel II en uno de los casos y fisuras en la playa de vías de la estación de Chamartín en otros.
Las medidas de cierre de los túneles a causa de la presencia de agua se corresponden con estrictos protocolos de seguridad y sólo pueden ser levantadas una vez que el concesionario realice las obras necesarias para reparar las filtraciones para devolver al túnel las condiciones de seguridad necesarias.
Fue en enero de 2014 cuando el Ayuntamiento formalizó con Dragados la concesión del contrato de Gestión Integral de Infraestructuras Viarias de la Ciudad de Madrid. Incluye, entre otras prestaciones, la vigilancia, conservación, mantenimiento y acondicionamiento de las estructuras y obras de paso de las vías y espacios públicos, así como su adecuación a la normativa vigente en materia de accesibilidad y movilidad, el mantenimiento de su funcionalidad y la seguridad.