El exportavoz de Ciudadanos en Alcobendas, Miguel Ángel Arranz, ha anunciado este jueves que abandona la formación naranja y el grupo municipal, pero mantiene al acta y seguirá el resto de la legislatura como no adscrito. "Trabajaré como siempre he hecho por nuestros vecinos de Alcobendas, para seguir haciendo realidad el compromiso adquirido en 2019", ha indicado en su cuenta personal de Twitter.
Esta decisión de Arranz complica sobremanera el acuerdo entre PSOE y Ciudadanos para relevarse al frente de esta alcaldía y que fuera un edil naranja -Aitor Retolaza- quien sustituya al socialista Rafael Sánchez Acera en el ecuador de la legislatura como se pactó tras las elecciones de 2019.
El traspaso de la vara de mando se tenía que haber producido en junio, pero entonces Ciudadanos pisó el freno. En una reunión de la agrupación, se explicó entonces a los afiliados que no habría votación de investidura por el momento y que se daría "un plazo de 100 días" al recién elegido vicealcalde, el citado Retolaza, para que se adaptase al nuevo cargo antes de convocar el pleno.
De esta forma, el PSOE siguió gobernando este importante municipio del norte de Madrid por tiempo indeterminado y sin que Ciudadanos tuviera la certeza de que Retolaza estuviera en condiciones de asumir el puesto de alcalde, si bien Villacís ha defendido a capa y espada desde entonces que la formación naranja gobernará en Alcobendas.
Ciudadanos depende de Podemos
Con la decisión de Arranz, empeora aún más esta posibilidad. La mayoría que tenían PSOE y Cs ha menguado y la coalición pasa ahora a depender del concejal de Podemos para esa futura votación y el resto de la legislatura. El edil morado tendría que votar 'sí' al candidato naranja.
Una posibilidad que no se ha dado en ningún municipio de España del tamaño y el potencial económico de Alcobendas, una de las localidades con mayor renta per capital de la Comunidad de Madrid. La moción de censura de marzo en el Ayuntamiento de Murcia que presentaron PSOE y Ciudadanos salió adelante con los votos de Podemos... pero para beneficio del candidato socialista.
Además, esa combinación en la que un alcalde de Ciudadanos pase a depender del apoyo externo de Podemos sería difícil de 'digerir' para algunos miembros del grupo municipal de Cs. Fuentes de Cs en dicho municipio advierten a Vozpópuli de que dos de los cuatro ediles que le quedan a la formación centrista de Alcobendas ven "con simpatía" que el PP se haga con la alcaldía, un peligro para la nueva coordinadora autonómica en la región, la citada Villacís.
Así que un pleno de investidura para aupar a Retolaza -mediante voto secreto- se podría volver en contra de los intereses de PSOE y Cs puesto que si ninguna de las candidaturas en liza alcanza el umbral de la mayoría absoluta, que está en 14 concejales, el consistorio pasaría entonces a manos de la lista más votada, que fue la del PP con 10 ediles. De ahí el temor en las filas naranjas.
El contratiempo de Alcobendas se produce apenas un día después de que Ciudadanos firmase con el PSOE la entrada en el gobierno municipal de Leganés, el quinto municipio en tamaño de la Comunidad de Madrid, después de que los socialistas rompieran hace unos meses con Más Madrid y se quedasen en minoría.
