La Policía Nacional obtuvo el pasado mes de marzo cuatro mensajes de texto presuntamente enviados por el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz en 2013 y en los que supuestamente daba instrucciones para espiar al extesorero del PP Luis Bárcenas con el objetivo de descubrir si tenía en su poder información comprometedora sobre altos cargos del partido en relación a la 'caja B' de los populares, según publican este domingo El Mundo y El Confidencial.
Estos SMS, entregados al juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, fueron enviados al entonces secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, quien decidió el pasado mes de marzo entregárselos a la Policía ante notario. El 'ex número dos' de Interior tomó esa decisión después de que Fernández Díaz realizase unas declaraciones asegurando que se había enterado por la prensa de la operación Kitchen por la prensa y en las que descargaba la responsabilidad sobre Martínez
Los mensajes de texto habrían sido el detonante definitivo para que la Fiscalía anticorrupción solicitase el pasado viernes la imputación de Fernández Díaz y de la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal.
Supondrían la prueba de que, como declaró el ex comisario José Manuel Villarejo, el exministro del Interior ordenó a los agentes de Kitchen que intentaran convertir en confidente al entonces chófer personal de la familia Bárcenas, Sergio Javier Ríos Esgueva, según El Confidencial.
Los SMS comprometedores
"Chófer B: Sergio Javier Ríos Esgueva (ahora hace esa función con la mujer). Es importante", rezaba el primero de los mensajes presuntamente enviados por Fernández Díaz a su 'número dos' el 13 de julio de 2013, apenas 48 horas antes de que Bárcenas revelase ante la Audiencia Nacional detalles sobre la financiación irregular del PP, según ha desvelado El Mundo.
"Es importante", habría subrayado el exministro apenas dos horas después en un segundo mensaje, de acuerdo a la información publicada por ese diario.
El tercer mensaje intervenido por la unidad de Asuntos Internos de la Policía, según El Confidencial, fue enviado solo unos días después, a finales de ese mes de julio, en plena ofensiva contra el Gobierno por la caja B del PP. En ese contexto, Fernández Díaz ordenó al secretario de Estado de Seguridad que se coordinara con el CNI para trabajar supuestamente de forma conjunta en el espionaje al extesorero.
El cuarto y último mensaje habría entrado en el teléfono del secretario de Estado de Seguridad el 18 de octubre de 2013. Fernández Díaz le envío unas líneas que hacían referencia al volcado del contenido de los teléfonos móviles de Bárcenas proporcionados por el "informador". "La operación se hizo con éxito", habría escrito el exministro.
Los SMS obran en poder del juez García-Castellón, quien deberá pronunciarse sobre la solicitud de la Fiscalía de imputar a Fernández Díaz así como a Cospedal por el presunto espionaje al extesorero del PP.