La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado la advertencia sobre el mercurio que tiene el pescado. Este alimento es imprescindible para mantener una alimentación que sea equilibrada. Seguir una dieta que contenga pescados y mariscos puede contribuir a mantener la salud cardiovascular. Además, es básico para se produzca un desarrollo embrionario y un buen crecimiento de los niños. Y es que el pescado aporta una serie de proteínas que tienen un alto valor biológico, además de vitaminas A, D y B12, selenio y yodo.
Esto hace que el pescado sea indispensable en la dieta. Una de las claves se encuentra en la variedad, es decir, alternar el tipo de pescados que se van comiendo. Hay que tener en cuenta que la Agencia de Seguridad Alimentaria (AESAN) ha alertado en varias ocasiones de la presencia en diferentes tipos de pescados de mercurio, es decir, de un metal pesado que puede llegar a ser muy tóxico.
Por este motivo, la AESAN siempre ha explicado algunas recomendaciones de consumo restrictivas con ciertas especies de pescados, y sobre todo centradas en mujeres embarazadas y niños. El problema, según ha contado la OCU, es que ahora el Sistema de Alertas Europeas de Seguridad Alimentaria (RASFF) ha notificado a las autoridades españolas de la presencia de niveles de mercurio superiores a los límites legales permitidos en rodajas de pez espada congelado procedentes de nuestro país.
Ante este aviso, la OCU ha recuperado un estudio que se realizó para medir la cantidad de mercurio que está presente en los pescados y mariscos que son más consumidos en nuestro país. ¿Quieres saber cuáles son los productos que tienen un mayor nivel de esta químico? Te contamos la conclusión a la que llegó este informe.
La OCU se pronuncia sobre el mercurio en el pescado
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) analizó más de 100 productos, la gran mayoría de ellos frescos, pero también congelados y en lata. Tras realizar el estudio puedo determinar que la mayoría de los productos que se analizaron tenían niveles bajos de mercurio, destacando a los mejillones y almejas, el pulpo y los calamares, langostinos, salmón y lenguado.
Por otro lado, las concentraciones más altas de mercurio se dieron en el atún rojo, el pez espada, los tiburones tintorera y marrajo. El punto común entre todo estos peces es que se trata de predadores que tienen un gran tamaño y son longevos. Y como último conclusión se determinó que el "nivel medio de mercurio es menor en los productos de acuicultura que en los de pesca".
La OCU elaboró una lista con los pescados que tienen un contenido elevado de mercurio: pez espada/emperador, atún rojo, tiburón, cazón, marrajo, mielgas, pintarroja, tintorera y lucio. Mientras que en la lista de productos con un contenido bajo se encuentran: bacalao, arenque, camarón, calamar, cangrejo, berberecho, boquerón, chirla, cigala, coquina, jurel, gamba, merluza, dorada, trucha, sardina, etc.
Según explica la entidad, los adultos sanos no tendrían que abusar en el consumo de peces predadores puesto que "pueden contener altos niveles del peligroso metilmercurio. Es importante alternar esos pescados con otros menos contaminados: dorada, sardinas, lenguado, trucha, salmón...". Además, cuenta que la población más sensible, es decir, los niños que son menores de 10 años y las mujeres que quieran quedarse embarazadas o estén en un periodo de lactancia, no tendrían que "comer pescados grandes, como el pez espada, las distintas especies de tiburón o el atún rojo".
Y por último, la OCU afirma que "los niños mayores de 10 años y adolescentes se recomienda un máximo de 120 gramos al mes de peces que puedan contener una alta concentración de mercurio".