Lo que habitualmente es uno de los parques más transitados de Barcelona ha amanecido blindado por decenas de furgones de los Mossos d'Esquadra. La llamada de la entidad soberanista Asamblea Nacional Catalana (ANC) a la movilización masiva en el entorno del Parlament hizo que la Generalitat desplegase ayer por la tarde un amplio dispositivo policial para blindar el recinto en el que se ubica la cámara catalana.
Los únicos que hacen cola en los accesos al parque de la Ciutadella son los cientos de periodistas acreditados para cubrir el evento en el que el presidente Carles Puigdemont puede declarar, previsiblemente, la independencia de Cataluña. Habrá que esperar hasta las seis de la tarde.
Los informadores antes de acceder al edificio principal deben pasar hasta cuatro controles. Entre ellos hay hasta 300 medios extranjeros. Las explanadas del parque se han convertido en sets de televisión improvisados, desde los que los presentadores de las cadenas internacionales realizan conexiones en directo.
Mientras tanto, alrededor del perímetro del parque circulan patrullas de los Mossos uniformados y coches camuflados. La Guardia Urbana ha cortado al tráfico cuatro vías aledañas al parque: Marquès de l'Argentera, Circunvalaciín y los pasesos Picasso y Pujades. La ANC ha trasladado su convocatoria al Paseo de Lluis Companys.
Resultados del 1-O
Por el momento, la Mesa del Parlament se ha reunido a las diez de la mañana y ha "tomado nota" de los resultados de la consulta ilegal del 1 de octubre, transmitidos por el Govern. Lo ha hecho con el rechazo de los grupos de la oposición y con la discrepancia del secretario general de la Cámara.
La comunicación oficial del Ejecutivo catalán está suscrita por el vicepresidente Oriol Junqueras, el consejero de Presidencia y portavoz del, Jordi Turull, y el de Exteriores y Relaciones Institucionales, Raül Romeva.