La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) ha solicitado a las consellerias de Agriculturas y Sanidad que pongan en marcha un plan específico para combatir los crecientes y "virulentos ataques" de la mosca negra y del mosquito tigre. Y es que en las últimas semanas han empeorado y causado "verdaderos estragos" en la salud de los agricultores, así como "pérdidas económica".
Esta plaga está causando "graves problemas" a la hora de acometer las tareas de recolección, poda o riego, dado que aquellos que lo intentan se ven obligados a desistir debido a las "innumerables picaduras" que reciben de estos insectos, alerta la organización agraria en un comunicado.
Recolectores, en urgencias
Sin ir más lejos, asegura, la semana pasada ocho recolectores que trabajaban en Alcàntera del Xúquer acabaron en urgencias, asegura.
Hace poco más de una semana, los expertos ya alertaron de una plaga de mosca negra en los municipios cercanos a los ríos este verano, cuya mordedura puede provocar infecciones o reacciones alérgicas.
Según informó Anecpla, la mosca negra ya tiene aterrados a los vecinos de no pocos municipios ribereños. Del Ebro al Manzanares, muchas son las localidades afectadas por la plaga de este insecto que, con sus apenas seis milímetros de longitud, “se está convirtiendo ya en un problema de salud pública en buena parte de España”.
Su directora general, Milagros Fernández de Lezeta, subrayó que “el problema fundamental de este insecto es que no pica, sino que muerde en forma de sierra, generando una herida de consideración importante y pudiendo dar lugar a infecciones y reacciones alérgicas muy alarmantes, que en algunos casos requieren hospitalización”.
Ataques más agresivos
“No es una especie invasora, la mosca negra es autóctona, pero desde hace varios años se observan picos agresivos en sus ataques a humanos. De ahí que veamos tan necesario hacer frente a esta plaga que se está convirtiendo en un problema de salud pública” añadió.
Desde Anecpla se recomienda tomar una serie de precauciones para evitar ser víctima de este insecto, durante los próximos meses de verano. Entre ellas, vestirse con ropa clara; evitar pasear por el curso de los ríos o zonas cercanas a los mismos, sobre todo a última hora de la tarde; instalar mosquiteras en puertas y ventanas en las zonas de riesgo; evitar la acumulación de agua en el exterior de la vivienda; controlar los desagües; utilizar repelentes certificados y contactar con profesionales.
Si se sufre la mordedura de la mosca negra es importante no rascarse, ya que puede empeorar la herida y hacer que se infecte. Se recomienda aplicar hielo para bajar la inflamación, o una pomada con un corticoide suave. En caso de sufrir una reacción alérgica, esta asociación recomienda acudir al centro de salud más cercano o al hospital.