Madrid recibirá en 48 horas la visita de 5.450 aficionados ingleses que acudirán a la capital a presenciar los partidos de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones. Una cifra que refleja a los hinchas que tienen entrada a los estadios pero que podría ser mayor. Para evitar incidentes la Policía Nacional y la Policía Municipal de Madrid han establecido un dispositivo de seguridad que seguirá los pasos de Semana Santa de estos 'hooligans'.
Como es habitual para este tipo de encuentros se ha organizado un seguimiento de las aficiones del Chelsea, el martes, y del Manchester City, el miércoles, según informan a Vozpópuli fuentes de la Delegación del Gobierno. Se producirá una presencia policial constante, además de las labores de vigilancia y acompañamiento hasta el estadio.
Quejas vecinales
Este dispositivo contará también con la Policía Municipal de Madrid para evitar el consumo de alcohol en la vía pública. Una de las mayores reclamaciones de las asociaciones vecinales del distrito Centro es que con este tipo de partidos la Plaza Mayor se convierte en un macrobotellón de aficionados extranjeros con el beneplácito de los hosteleros de la zona.
Es más, en la última reunión entre asociaciones vecinales y la delegada del Gobierno, Mercedes González, los residentes expresaron su preocupación por este asunto. También se vigilará que no se reproduzcan imágenes del pasado, con hooligans riéndose de indigentes de la zona.
Al ser partidos declarados de alto riesgo por la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, se ha establecido un amplio dispositivo de seguridad para ambos encuentros. Este operativo fue definido el pasado jueves y viernes tras reuniones en la Delegación del Gobierno.
No obstante, el en los partidos de ida de la semana pasada no hubo enfrentamientos entre aficiones y eso es un buen precedente, según aseguran fuentes policiales a este diario.
1.850 aficionados del Chelsea
Para el partido de mañana en el Santiago Bernabeu, la Delegación del Gobierno activará un dispositivo que contará con 300 agentes de la Policía Nacional procedentes de la Unidad de Intervención Policial, de la Unidad Especial de Caballería y de la Brigada Provincial de Información, que vigilarán las zonas aledañas al estadio.
Al despliegue de la Policía Nacional se unirán también 70 agentes de la Policía Municipal de Madrid, 30 componentes del SAMUR-Protección Civil, 3 del Cuerpo de Bomberos, 64 miembros de Cruz Roja y 1.011 vigilantes de seguridad del propio club de fútbol.
El club madrileño tiene previsto que unas 65.000 personas acudan al encuentro, para el que se han vendido todas las localidades. Se espera que unos 1.850 aficionados del club inglés se desplacen hasta Madrid para asistir a este partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions League.
3.600 aficionados del City
El partido de este martes será una prueba de fuego para los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad, quienes no tendrá tiempo para descansar ya que el día siguiente acudirán a la capital los aficionados del Manchester City para presenciar el partido de vuelta ante el Atlético de Madrid.
Para este miércoles está previsto que vengan a Madrid un total de 3.600 hooligans, según las cifras de Delegación del Gobierno en Madrid. Los policías estarán atentos de igual forma a que no se produzcan incidentes ni desórdenes públicos en los puntos neurálgicos de la capital. También se reforzará la vigilancia en horario nocturno debido a la época festiva de la Semana Santa.
