El magistrado Juan José Escalonilla ha citado a declarar como imputada a Gara Santana, una exempleada del departamento de prensa de Podemos, señalada por ejercer como niñera de uno de los hijos de la ministra de Igualdad, Irene Montero. El instructor al frente del caso Neurona le cita para el próximo 10 de mayo después de la que exescolta de la ministra asegurase en sede judicial que esta antigua trabajadora de la formación morada cuidó a sus hijos pequeños.
Así lo acuerda en una providencia a la que ha tenido acceso Vozpópuli y en la que ordena que se proceda a averiguar su domicilio para remitirle esta citación. La decisión de Escalonilla, que investiga a la formación morada por contratar a la consultora Neurona, se produce semanas después de la declaración de Elena González, antigua escolta de Irene Montero. Los investigadores pidieron su declaración para aclarar si Teresa Arévalo, también miembro del partido, ejerció como niñera de los bebés de Montero.
El objetivo era que ratificase la denuncia interna que se canalizó en el departamento de Cumplimiento Normativo de Podemos en relación a este asunto. Tanto el partido como la propia Arévalo (también imputada) han comparecido en el marco de estas diligencias para negar que ejerciera como niñera de los hijos de Pablo Iglesias e Irene Montero estando a sueldo del partido. Pese a ello, el instructor citó a González para que esclareciera si, como ya denunció previamente, Arévalo pudo cobrar de Podemos mientras cuidaba al bebé.
La confesión de la exescolta
González cumplió con la citación y compareció el pasado 22 de marzo. Sin embargo, en su declaración como testigo, no solo se refirió a este asunto (sobre el cual no ahondó), sino que sacó a relucir otro nombre: el de Gara Santana. Según dijo, esta otra empleada del departamento de prensa trabajó también cuidando a los pequeños. González dijo que ella lo sabía porque, como ejercía las veces de chófer de Montero, le acercó al domicilio de la ministra de Igualdad en alguna que otra ocasión.
Según dijo, se enteró de las labores de Santana porque ella misma se lo comentó. En concreto relató al juez que Santana le trasladó que estaba cansada de hacer dicho trabajo de cuidadora ya que le estaba enfrentando con otros miembros del equipo de prensa de Podemos que tenían que trabajar más debido a su ausencia. Tras escuchar esta nueva confesión, Escalonilla (que acaba de asumir el caso Niñera por orden de la Audiencia Provincial) accedió primero a identificar a Gara Santana, tal y como solicitaron las acusaciones populares que ejercen Asociación de Juristas Europeos ProLege y Vox.
Ahora, y tras atender a las explicaciones del partido, cita para el 10 de mayo a esta antigua empleada de Podemos para que se pronuncie sobre los hechos y confirme si cobró del partido en el momento de los hechos (año 2018). Del mismo modo González volvió a confirmar en su cita judicial que tuvo que hacer funciones que no estaban en sus competencias laborales, tales como las de chófer de Montero y sus familiares, así como realizar recados que le encargaría esta primera. Según dijo ante los investigadores, ella solo cumplía órdenes.
Dos niñeras para Montero
De esta forma el caso Niñera suma ya dos empleadas de Podemos imputadas como posibles cuidadoras de los pequeños de Montero. En lo que respecta a Arévalo, su nombre ya salió a relucir en la denuncia que redactó Mónica Carmona, exresponsable de Cumplimiento Normativo, sobre las posibles irregularidades cometidas en el seno de la formación. La abogada, que acabó siendo despedida, explicó que en noviembre de 2019 inició dos investigaciones sobre unos hechos "graves" ya que consideró que se podría haber hecho un uso irregular de los fondos del partido.
Estas pesquisas arrancaron a tenor de una denuncia interna confidencial según la cual Montero utilizaba "habitualmente" a Teresa Arévalo (jefa de gabinete adjunta en el Ministerio de Igualdad), como niñera de sus hijos. Carmona dijo que estos hechos podrían implicar una administración desleal de los fondos del partido en beneficio de Montero e inició unas pesquisas. Contrastó, además, que Arévalo viajó a Alicante en octubre de 2019 junto con la ministra para, supuestamente, cuidar de los bebés mientras ella participaba en un acto de campaña electoral.
Tanto el tesorero de Podemos, Daniel de Frutos, como la gerente, Rocío Esther Val, negaron irregularidad alguna y explicaron que Teresa Arévalo no cobró nunca de la formación morada. Según relataron, su sueldo provenía del Congreso de Diputados mientras ejerció como coordinadora del gabinete de la portavocía de Unidas Podemos y posteriormente del grupo parlamentario, pero nunca del partido. También negaron que actuara como niñera de los bebés de Iglesias y Montero precisando que si viajó a Alicante fue para participar también en el acto de campaña.