El Ministerio de Hacienda controlará el uso de las tarjetas de crédito por parte de altos cargos de la Generalitat, a fin de que no puedan emplear dinero en el referéndum del 1 de octubre.
Técnicos del ministerio que dirige Cristóbal Montoro se han reunido con representantes de los bancos para informarles del mecanismo de control de los pagos en Cataluña, después de que el Gobierno asumiera el control de los gastos esenciales de la Generalitat por su negativa a remitir un informe semanal sobre el destino de sus recursos. El Ejecutivo dio un plazo de 48 horas, que vence mañana, para que la Generalitat le enviara el acuerdo de no disponibilidad de su presupuesto, que no afecte a servicios fundamentales.
La Generalitat ya ha recurrido el acuerdo del Consejo de Ministros del pasado viernes para impedir la intervención de sus cuentas, pero al no haber solicitado medidas cautelarísimas el Tribunal Supremo no se verá obligado a pronunciarse en los próximos días. Fuentes del Supremo han recordado que ese trámite obliga a dar traslado a las partes para que presenten alegaciones y que, en el caso de la parte demandada -la Abogacía del Estado-, ese plazo es diez días.
Si el Govern de Carles Puigdemont hubiera solicitado una suspensión cautelarísima, el Supremo se habría visto obligado a resolver en un plazo de 48 horas, con lo que existiría la opción de de frenar de inmediato el acuerdo del Ejecutivo central.