Más Madrid nació como una revancha política por parte de Íñigo Errejón contra Pablo Iglesias y Podemos tras la aplastante victoria de este último en Vistalegre II. Aquella noche, en febrero de 2017, apartado para siempre de la dirección del partido, pues el ala cercana a Iglesias jamás dejaría que volviera a tocar cuota de poder, Errejón ideó cómo seguir siendo relevante en la política española.
La idea estaba clara, había que seguir la línea ganadora que había mostrado Ahora Madrid en las elecciones municipales de 2015, cuando logró que Manuela Carmena, una desconocida para millones de personas, lograse acceder a la alcaldía de Madrid. Aquella plataforma ciudadana, que bebía directamente de Guanyem Barcelona, pactó con Podemos una candidatura única que les aupó al estrellato.
Cuatro años después, y con Errejón despechado, consiguió convencer a Manuela Carmena para fundar Más Madrid y concurrir a las elecciones. Una fragmentación en el voto que evitó, por ejemplo, el sorpasso en la Comunidad de Madrid, donde el socialista Ángel Gabilondo se quedó con la miel en los labios tras obtener 37 escaños, siete más que una Díaz Ayuso que terminó siendo presidenta y ahora es la líder absoluta de la región.
Aunque Errejón apuntó al Congreso de los Diputados, lugar donde ha defendido escaño a través de Podemos, Más País y Sumar, dejó en manos de Mónica García, actual ministra de Sanidad, y Rita Maestre, expareja de Errejón, el futuro de Más Madrid.
Electoralmente, la gestión de Más Madrid es bastante sobresaliente. Ha conseguido aunar a lo largo de los últimos cinco años el descontento contra las políticas del Partido Popular y hacer suyo el sentir de un espectro poblacional bastante amplío. Igualando, además, en número de votos y escaños al PSOE.
Los pilares ideológicos han sido, al margen de la crítica constante al Gobierno de Ayuso, la sanidad pública y las políticas feministas, entre las que se encuentran una férrea defensa de los derechos de la mujer y la enérgica condena de agresiones sexuales y actos machistas.
Dijimos “hermana yo sí te creo” y cumplimos. Hoy el “solo sí es sí” ya es ley, el feminismo un poco más imparable y nuestro país un poco mejor.
Gracias a quienes habéis empujado. Ahora vamos a por más ?— Mónica García (@Monica_Garcia_G) August 26, 2022
Al mando de la nave se quedó Mónica García, quien todavía lidera Más Madrid desde su sillón en el Ministerio de Sanidad. De portavoz en la Asamblea está Manuela Bergerot y en el Ayuntamiento, Rita Maestre. Las tres han sido señaladas públicamente en la última semana por su papel en el 'caso Errejón'.
Cuando varias mujeres denunciaron, en una noticia que recogió el diario Público, y a través del Instagram de Cristina Fallarás, presuntas agresiones sexuales y comportamientos machistas por parte de Íñigo Errejón, el partido le pidió explicaciones, unas que se concretaron en su salida con efecto inmediato y dimisión de todos sus cargos.
Pero, en la rueda de prensa del pasado lunes, las tres portavoces de Más Madrid reconocieron que, en verano de 2023, conocieron un episodio, a través de un hilo en 'X' (antes Twitter) de una presunta agresión del exportavoz de Sumar en un festival en Castellón. En lugar de abrir una investigación, como demanda su código ético, dejaron correr el asunto tras confiar en la palabra del implicado y Loreto Arenillas, otrora jefa de gabinete de Errejón.
Un posicionamiento con el agresor y no con la víctima que dio al traste con todo. Un elefante en la habitación que, por temor a perder espacio político, ha terminado devorando internamente y de cara a las bases de Más Madrid. El partido del "yo sí te creo hermana" está en manos de una negligencia política que, quién sabe, le costará la labor de oposición en Madrid y el crédito electoral en las próximas elecciones.
La crisis que avivó la enésima revancha en el espacio a la izquierda del PSOE, dando aire a Lobato y a Sánchez, pues el 'caso Errejón' ha tapado los nuevos descubrimientos del 'caso Koldo' y la investigación del juez Juan Carlos Peinado sobre Begoña Gómez y la cátedra en la UCM. Quien, por cierto, el 13 de noviembre se sentará en la Asamblea para ser cuestionada por la comisión de Ayuso.
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