La dirección de Podemos dejó claro ayer que en sus planes no está frenar (ni con el artículo 155 ni mediante recurso al TC) una eventual declaración unilateral de independencia (DUI) por parte de la Generalitat, extremo que se prevé para el fin de semana. La formación de Pablo Iglesias considera que lo único que cabe en este momento es que Mariano Rajoy dimita y "se marche" antes de que los secesionistas proclamen su desconexión.
No obstante, el partido morado no comparte la DUI y propone la negociación de un "referéndum pactado" como solución, pero si esa declaración unilateral termina produciéndose, el nuevo escenario ya lo tiene estudiado: le permitirá defender un nuevo "proceso constituyente", afirman fuentes internas consultadas por Vozpópuli.
El impulso de un "proceso constituyente" -poner fin al "régimen del 78"- fue una de las ideas fuerzas que empleó Podemos allá por 2014, año de su nacimiento. Sin embargo, el partido de Iglesias aparcó en 2015 este planteamiento y pasó a exigir solamente una "mejora" de la Constitución. Todo ello dentro de su giro hacia postulados más propios de la socialdemocracia nórdica que de la izquierda radical europea. Ahora, en plena crisis de Cataluña, justo cuando el Estado atraviesa uno de los momentos más delicados de las últimas décadas, la formación morada vuelve a la carga y ya planea rescatar esa invocación a la apertura de un "proceso constituyente".
Las fuentes citadas remitían este lunes a un artículo firmado por el catedrático Javier Pérez Royo, constitucionalista de cabecera de los estrategas de Podemos. Titulado Proceso Constituyente y publicado en lamarea.com, el análisis de Pérez Royo parte de la sentencia del TC que tumbó 14 artículos del Estatuto de Cataluña. A su juicio, "únicamente mediante un proceso constituyente podremos salir del golpe de Estado que dio el PP a través de la STC 31/2010".
El que fuera sólo diez días candidato de Podemos por Sevilla a las generales de 2015 sostiene que "la Constitución Territorial del 78, el binomio Constitución/Estatuto de Autonomía, ha dejado de ser aceptada en Cataluña. Y una Constitución sin adhesión ciudadana es una norma estéril", subraya Pérez Royo.
A su juicio, "frente a un golpe de Estado protagonizado por el Tribunal Constitucional, una sociedad no tiene defensa". Y advierte de que este "problema constituyente", del que "depende la convivencia pacífica de manera estable", tiene una "proyección indefinida en el tiempo". Por ello, Podemos tratará de irrumpir aquí instando a sus aliados a revertir el orden constitucional vigente.
Hacia la "abdicación"
De igual modo, en un argumentario interno difundido este lunes por Izquierda Unida, integrante de la coalición Unidos Podemos, aparece un llamamiento a la sociedad para que protagonice un "proceso constituyente". Un fenómeno que suponga también la "abdicación del ciudadano Borbón", dice el texto en alusión al rey Felipe VI.
Tal emplazamiento va seguido de otro que reclama una "movilización en defensa de la democracia frente a la violencia y la represión del régimen en Cataluña". Ello, a raíz de las cargas policiales contra manifestantes pro-referéndum que se produjeron el pasado domingo. "Exigimos una solución democrática que pase por un referéndum de autodeterminación", añade el partido de Alberto Garzón. Es decir, la apelación a una consulta "pactada" en Cataluña como punta de lanza para activar dicho "proceso constituyente".