Política

El PP explota la brecha militar del Gobierno y se abre a acuerdos sobre el gasto en Defensa

Génova reclama a Sánchez que ponga de acuerdo a sus socios y elude confirmar qué haría en el Congreso, pero Sémper recuerda el "sentido de Estado" del PP

  • Núñez Feijóo, este domingo en Galicia -

Se avecina una nueva tormenta política en el Consejo de Ministros a cuenta del gasto en Defensa, espada de Damocles con la que Estados Unidos persigue a Europa y un motivo de discordia entre el PSOE y sus aliados progresistas. Entre ellos, Sumar, socio de la coalición. En su día, España se comprometió a incrementar la inversión al 2% del PIB hasta 2029. Una empresa ambiciosa, que se antoja tan lejana como urgente tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Si la OTAN exige anticipar a esa cifra al verano de este año y elevarla al 3,7% en el plazo previsto por nuestro país, Estados Unidos, directamente, dispara el órdago y reclama llegar al 5% de forma inmediata. 

De momento, Pedro Sánchez se zafa de las presiones y mantiene intacta la hoja de ruta que rubricó en la última cumbre de la OTAN. Aunque, una vez más, se topa de bruces con la realidad de su debilidad parlamentaria. Porque, ni siquiera para cumplir con lo pactado dispone de una mayoría en el Congreso de los Diputados. Ergo, el apoyo del Partido Popular se vuelve a antojar imprescindible. 

El equipo de Alberto Núñez Feijóo se niega a desvelar sus cartas. "Ya quisiera Sánchez que le despejáramos sus dudas parlamentarias", concluye una persona próxima al líder popular, que este domingo, en una entrevista en EL MUNDO, tampoco quiso despejar la incógnita de lo que haría su grupo en una hipotética votación: "El señor Sánchez primero tiene que informarme. Segundo, pedírmelo. Y tercero, le responderé. Por este orden". No obstante, dejo un espacio al entendimiento para una cuestión de la trascendencia que, a día de hoy, representa el gasto en Defensa: "Nunca le cierro la puerta a mi país. Pero recuerdo que yo no estoy aquí para que Sánchez sea presidente del Gobierno, sino para cambiarlo". 

En esa línea, fuentes de la dirección popular atornillan las palabras de Feijóo y defienden que antes de llamar a la puerta del PP el Gobierno debe "pactar con el Gobierno". Luego, apostillan: "Que nos llamen". Lo importante, en todo caso, "es que tengan un acuerdo entre ellos". Una misión imposible, visto lo visto. Porque la brecha entre los socios parece insalvable. Un río revuelto de la coalición en el que Feijóo pretende pescar su ganancia que, en definitiva, no es más que ver la caída de Sánchez. En el equipo del líder popular insisten: entre sus prioridades no está la de "solucionarle problemas" al jefe del Ejecutivo. Y se remontan a aquella frase que pronunció durante su investidura: "Cuando sus socios le fallen, no me busque". 

El sentido de Estado del PP

Sobre el gasto en Defensa, los populares recuerdan que "iría dentro de los Presupuestos". Aunque existe una posibilidad para que se apruebe por otra vía. "No hacemos política ficción", replican. La percepción es que no habrá entendimiento. "El gasto en Defensa lo pondrá en su sitio el presidente que viene, el que está no tiene capacidad para poner de acuerdo ni siquiera a su Gobierno", vaticinan. Lo que no quita que el PP, tal y como reivindicó ayer Borja Sémper, "siempre" se ha caracterizado por tener "sentido de Estado". Especialmente para cuestiones como "política exterior y Defensa". Es decir, que la posibilidad de llegar a un acuerdo en esta materia con el Gobierno, existe.

Núñez Feijóo participa este martes en una cumbre extraordinaria del PP europeo -por videoconferencia- que tiene lugar un día después del encuentro organizado por Macron en París con los principales mandatarios del bloque. El objetivo (fallido) era que Europa no se quede al margen de la negociación entre Trump y Putin para poner fin a la guerra en Ucrania. El portavoz popular anticipó ayer que el líder de su formación trasladará a sus homólogos que "Europa puede y debe hacer más por su propia seguridad, sin perder de vista que Estados Unidos es un aliado imprescindible y estratégico". 

En cuanto el posible fin de la guerra en Ucrania, el PP no quiere posicionarse de manera rotunda ni a favor ni en contra de las intenciones anunciadas por Trump. "Nosotros no hemos cambiado nuestra posición, además de los componentes éticos y morales que tiene enfrentarse a una invasión injustificada como hizo Putin en Ucrania, tiene que ser una posición coordinada con nuestros socios en la UE. El mundo se está transformando y Europa tiene que reaccionar. Que Europa se defienda y que garantice también una paz justa en Ucrania es nuestra posición", resumió Sémper. 

Con más claridad censuró la falta de interlocución con el Gobierno y la asonancia dentro de la Moncloa: "No se ponen de acuerdo ni con la posición que hay que mantener con Rusia, ni con Ucrania, ni tampoco con el papel que tenemos que mantener con Estados Unidos". Una falta de cohesión que deriva en que "España es una fuente de desconfianza en política exterior y en Defensa". 

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli
Iván Redondo se deja ver de nuevo por el Palacio de la Moncloa: "Desde que se fue, está deseando volver"
Vox declara la guerra a Iván Espinosa: su ejército virtual le ataca por el acto en la Complutense