El comisario jubilado José Manuel Villarejo no acudirá, salvo sorpresa de última hora, a la 'Comisión Fernández Díaz', la que investiga las escuchas en el despacho del exministro del Interior y la existencia de una supuesta "policía política" bajo su mandato. El PSOE, según fuentes de su grupo parlamentario en el Congreso, se niega a apoyar su citación, que sí la reclaman, en cambio, otras fuerzas de la oposición como Podemos, Esquerra Republicana (ERC) y el PDCat (antigua Convergència). Las confesiones de Villarejo en el programa Salvados (La Sexta) el pasado domingo no han supuesto ningún cambio de posición en la dirección del Grupo Socialista, aseveran tales fuentes.
Hasta la fecha la principal razón esgrimida por los socialistas no se basaba en la falta de credibilidad de Villarejo sino en que sus "duelos mediáticos y judiciales" y sus "problemas personales" con el exjefe de Asuntos Internos de la Policía Marcelino Martín-Blas, "no son del interés general". Podemos y los separatistas también han reclamado que Martín-Blas sea convocado a la comisión. Villarejo acusó en dicho programa a la nueva portavoz del PSOE en el Congreso, Margarita Robles (jueza en excedencia) de ordenarle investigar al exinstructor de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.
Cabe recordar que el PSOE ya giró en este asunto tras la reelección de Pedro Sánchez. En concreto, la pasada semana secundó las comparecencias de los policías Eugenio Pino y Ángel Fuentes Gago, que acudirán a dicha comisión el próximo 5 de julio. Sin embargo, los socialistas se habían opuesto bajo mandato de la Gestora.
"No vamos a dar crédito a las palabras de este señor", señalan fuentes del Grupo Parlamentario socialista
"No vamos a dar crédito a las palabras de este señor", señalan las fuentes socialistas citadas, negando así que Villarejo contara verdades en su intervención en Salvados. Tras la emisión del programa, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, exigió al PSOE que respalde la citación del comisario. Así lo expresó en las redes sociales: "Unidos Podemos pidió la comparecencia de Villarejo en el Congreso. PP, PSOE y C's dijeron NO. Después de #VersionVillarejo deben rectificar".
En la misma línea se pronunció su portavoz en el Congreso, Irene Montero: "Lo que Villarejo está contando es grave y exige su comparecencia en el Congreso. Pediremos al PSOE que levante su veto", escribió Montero. La formación morada también quieren que desfilen el exjefe de Asuntos Internos de la Policía Marcelino Martín-Blas y el exministro Alfredo Pérez Rubalcaba.
El excomisario llegó a afirmar en la entrevista televisiva que él está dispuesto a acudir a la Comisión de investigación del Congreso. Sin embargo, su paso por la misma está muy difícil, ya que a la negativa del PSOE se une que el cierre de este órgano está previsto para finales de julio, una vez concluya la prórroga de dos que meses que acordaron PP, Ciudadanos y los socialistas el pasado mayo. No obstante, la Diputación permanente podría adoptar otra prórroga.
Unidos Podemos pidió la comparecencia de Villarejo en el Congreso. PP, PSOE y CS dijeron NO. Después de #VersionVillarejo deben rectificar pic.twitter.com/bBIRu6KXNV
— Pablo Iglesias ?{R} (@PabloIglesias) June 25, 2017
Con todo, lo más probable es que las comparecencias del exdirector adjunto operativo (DAO) de la Policía Nacional Eugenio Pino y su jefe de gabinete, el inspector Ángel Fuentes Gago, sean las últimas antes de la fase de redacción de conclusiones. En principio, ambos testimonios habían sido fijados para esta semana (29 de junio), pero han sido pospuestos al 5 de julio ante la posibilidad de que se solapen con el Pleno de esta semana, que ha sufrido varias modificaciones. Sólo han declarado en esta comisión el exdirector de la Oficina Antifraude de Cataluña Daniel de Alfonso, el exministro Jorge Fernández Díaz y el exdirector general de la Policía Nacional Ignacio Cosidó.
El PSOE venía manteniendo hasta la restauración de Pedro Sánchez como líder socialista un pacto tácito con PP y Ciudadanos para no llamar a antiguos mandos policiales a la comisión y sólo a cargos políticos. Además, desde las filas socialistas se insistió en el que el testimonio clave era el de Cosidó como jefe de Pino y Gago. Pero Sánchez regresó a Ferraz y los socialistas cambiaron de criterio y apoyaron la convocatoria de dichos comisarios. El argumento esgrimido es que Daniel de Alfonso -que fue escuchado en su cita con Fernández Díaz- señaló en su comparecencia en el Congreso a Fuentes Gago como la persona que le propuso la entrevista con el exministro del Interior.
El PSOE considera ahora que este testimonio es suficiente para escuchar en sede parlamentaria tanto a Fuentes Gago como a su jefe en ese momento, Eugenio Pino. En cuanto a Rubalcaba, los socialistas se oponen a su citación al entender que el objeto de estudio de la Comisión se remite únicamente al mandato de Fernández Díaz y no al de su predecesor.
"Hablar mal" del PSOE
Por su parte, el co-portavoz de ERC, Gabriel Rufián, dijo este lunes a Pedro Sánchez que "si realmente el PSOE es un PSOE nuevo y de izquierdas", debe decir "a sus diputados (Antonio) Trevín y (Juan Carlos) Campo que dejen de vetar reiteradamente" las explicaciones en sede parlamentaria de Villarejo, Martín-Blas y Rubalcaba. Rufián se preguntó si realmente los socialistas no quieren que acuda Villarejo porque "podría hablar mal" de ellos.
Por otro lado, el comisario jubilado también manifestó ayer en Rac1 que "estaría encantado" de comparecer en el Parlament en la Comisión de investigación sobre la supuesta Operación Catalunya si el Ministerio del Interior le autoriza, trámite necesario por su condición de funcionario del Estado pese a estar jubilado.