En contra del pronóstico, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez estuvieron hoy reunidos dos horas y media, y al final han acordado unidad total de acción ante el desafío catalán. "Los dos consideran inaceptable" el referéndum del uno de octubre, ha dicho el ministro y portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, y el PSOE no lo ha desmentido.
Ambas partes hablan de encuentro "útil" y "cordial" y alguna fuente cercana al presidente del Gobierno explica a Vozpópuli que el año pasado no era así "porque los dos se estaban jugando la Presidencia del Gobierno". Eso explica que hayan permanecido reunidos en La Moncloa nada menos que dos horas y media, cuando anteriores citas duraron media hora y a los fotógrafos les costaba arrancarles una sonrisa.
Ahora el panorama es bien diferente, y ambos decidieron esta mañana aparcar la agenda económica para tratar lo urgente. Y lo urgente es Cataluña, asunto en el que Rajoy se ha comprometido a mantener "permanentemente informado" a su interlocutor. Creen que no es posible tolerar "la violación sistemática de la Constitución y las leyes", ha dicho Méndez de Vigo.
Buena parte de la cita ha estado centrada en las negociaciones del Brexit, que afectan a 300.000 españoles residentes en Gran Bretaña y a otros tantos británicos en España. El objetivo es que esas negociaciones concluyan con acuerdo y no se perjudique a los ciudadanos. Tanto Rajoy como Sánchez han mostrado su voluntad de "mantener el entendimiento" en materia de seguridad nacional y en lucha contra el terrorismo.
El deseo de no chocar en esta primera toma de contacto tras una época de fuertes enfrentamientos les ha llevado a aparcar la agenda económica, donde PP y PSOE tienen notables diferencias. No han hablado, por ejemplo, de la decisión socialista de seguir votando no al Objetivo de déficit el próximo martes en el congreso, aún cuando las autonomías vayan a disponer de mil millones más en 2018 para gasto social.