Hace muchos años que la mayor oposición que ha tenido el secretario general del PSOE de Aragón y hasta 2023 presidente de esta comunidad autónoma, Javier Lambán, ha procedido directamente desde su partido. Dirigida, particularmente, desde la central socialista con sede en el número 70 de la calle Ferraz de Madrid. Los desencuentros que ha tenido con el presidente del Gobierno, y la guerra interna a nivel orgánico en Aragón, con un PSOE de Huesca que ni tan siquiera le invitó a un mitin de la campaña de Sánchez en las generales de hace dos años, han provocado un distanciamiento que, este fin de semana, ha vivido uno de los momentos "más lamentables", según palabras de dirigentes de los socialistas aragoneses.
Aunque la relación entre Lambán y Sánchez nunca ha sido especialmente buena, por las diferencias en cuestiones como la política de sometimiento al separatismo, entre 2020 y 2021 ambos líderes 'firmaron' una tregua que inclusó provocó alabanzas mutuas en un acto de partido en Zaragoza. Pero al poco de eso, la elección por parte del presidente de Pilar Alegría como ministra, posteriormente como portavoz del Gobierno y en los últimos meses ungiéndola como su sustituta sin necesidad de primarias, forzando a los que querían presentarse a ellas a dar un paso atrás, ha agrietado aún más las costuras de unas relaciones que ya eran muy tensas. Y que en el 18º Congreso Regional que ha elegido precisamente a Alegría como sustituta de Lambán se ha visualizado de forma muy gráfica.
Aunque el propio expresidente de Aragón, la semana pasada, a través de sus redes sociales, ya anunció que no acudiría al cónclave que se celebraba en su ciudad, los que fueron sus compañeros de partido aprovecharon esa ausencia para condenarlo directamente al ostracismo político. A diferencia de lo que ocurrió previamente en otros congresos regionales, como los de Madrid, Andalucía o Castilla y León, donde los líderes salientes, en este caso forzados a abandonar por no contar ya con el respaldo de Sánchez, fueron despedidos con honores, con Lambán su sucesora únicamente mencionó su nombre una sola vez en la clausura, para hablar de las inversiones heredadas por el actual presidente, Jorge Azcón (PP). Las mismas menciones sobre Lambán realizó Pedro Sánchez.
El exlíder de los socialistas aragoneses, que sufre una enfermedad muy avanzada, ya había advertido que "mi presencia no resultaría muy grata ni para la nueva dirección ni para mí". Y así fue. Pues además de no poner en valor los ocho años en los que presidió el gobierno autonómico de Aragón, ni con palabras ni con un vídeo homenaje como se ha hecho en otras ocasiones en el PSOE, Pilar Alegría recuperó al antecesor de Lambán en el cargo, Marcelino Iglesias, que fue presidente de la comunidad entre 1999 y 2011, como presidente de los socialistas aragoneses. Mandando así un mensaje que, para algunos, tiene tintes de "querer borrar lo que supuso el lambanismo en Aragón".
Arropada por muchos dirigentes
Pilar Alegría contó con el apoyo de varios dirigentes socialistas que se desplazaron hasta Aragón para acudir al cónclave socialista. Además del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que intervino en el acto de clausura, también se dejaron ver por Zaragoza entre otros el expresidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero; el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños; el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez; el ministro de Economía, Carlos Cuerpo; la ministra de Migraciones, Inclusión y Seguridad Social, Elma Saiz; el president de la Generalitat y primer secretari del PSC, Salvador Illa o la presidenta del Gobierno de Navarra y secretaria general del PSN, María Chivite. Ninguno de ellos tuvo un recuerdo especial y específico hacia la figura de su antecesor, Javier Lambán.
Vídeo de varios compañeros
A diferencia de otros congresos regionales socialistas, en los que se difundió un vídeo alabando la hoja de servicios del líder saliente, en el caso del PSOE de Aragón ni tan siquiera esa muestra de afecto tuvieron con el expresidente autonómico. Sin embargo, al inicio del cónclave, sí se proyectaron distintos vídeos en los que dirigentes socialistas como el presidente de Castilla y León y secretario del PSOE-CLM, Emiliano García-Page; el presidente de Asturias y líder de la FSA, Adrián Barbón; la vicepresidenta del Gobierno y lideresa del PSOE-A, María Jesús Montero; la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades y secretaria general del PSPV, Diana Morant; el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática y secretario general del PSOE de Canarias, Ángel Víctor Torres; la presidenta del Congreso y lideresa del PSIB, Francina Armengol o los secretarios generales de Galicia, Murcia, La Rioja, Extremadura o el País Vasco le mandaban un mensaje de apoyo a Alegría.
