El PP andaluz se muestra muy activo en las fechas previas al Congreso Nacional que tendrá lugar el 12 de febrero en Madrid. Su líder, Juan Manuel Moreno, hombre de Moncloa más que Génova, aparece extremadamente beligerante con la posible continuidad de Dolores Cospedal como número dos de la formación. Moreno es partidario del lema ‘un hombre, un cargo’, aunque él mismo ejerce de presidente regional y senador.
Rajoy se ha desplazado este fin de semana al territorio de Moreno y, por tanto, hostil a la secretaria general del PP. El criterio del dirigente de los populares andaluces sobre este asunto es claro y sin ambigüedades. Cospedal no puede compaginar un ministerio de Estado como es Defensa, con las responsabilidades en el partido. Es posiblemente el barón más claro a este respecto y el que encabeza la demarcación que más delegados aporta al Congreso, 525. No está solo. Son de la misma o similar opinión, aunque más tibios en sus exposiciones, otros líderes regionales de enorme peso específico como Alberto Núñez Feijóo (Galicia aporta 317) o Juan Vicente Herrera (Castilla y León suma 340). o Alfonso Alonso, quien ha entrado en algunas quinielas para ocupar ese cargo.
En su discurso del viernes en Granada, Rajoy pidió abiertamente el voto de los militantes andaluces: "Os pido que me apoyéis y que me votéis", afirmó, en un amago de campaña electoral innecesario ya que no hay rival alguno que le dispute la presidencia nacional. En cualquier caso, Rajoy, consciente del peso de los populares del sur, no ha dejado pasar la oportunidad de estar presente en este acto, en el que también asistió Javier Arenas, mentor de Moreno Bonilla. No hubo rastro de la secretaria general, aunque estuvo presidente Juan Ignacio Zoido, ministro del Interior y uno de los dirigentes andaluces más próximos a la 'número dos' del partido. En sus palabras, el presidente de la formación no la mencionó. Dijo, eso sí, que tiene "las mismas ganas, ilusión, fortaleza y, si me permiten, sentido del humor que el primer día".
Enmiendas a la propuesta politica
Gran parte de las enmiendas a la ponencia política presentadas por los compromisarios, unas 1.300, están centradas tanto en el reclamo de primarias como en las incompatibilidades. Génova no tiene interés en debatir a fondo el primero, ya que considera que su propuesta de doble vuelta, con el voto definitivo a cargo de los delegados, es democráticamente impecable. La pugna sobre compaginar cargos es menos intensa ya que medio partido incurriría en esta irregularidad. Se plantea aprobar una fórmula ambigua y genérica, como hasta ahora. El nombre del 'número dos' no depende de lo que decidan los compromisarios sino de lo que piense Rajoy, que se mantiene en un mutismo absoluto al respecto.
Dolores Cospedal ha superado el endiablado asunto del Yak 42, una patata caliente de notables dimensiones que alguien depositó bajo su asiento. “Ha salido indemne y victoriosa, lo que no supone que haya ganado puntos en su particular carrera”, comenta una alta fuente de Génova. Los veteranos de la formación piensan que Rajoy actuará en forma salomónica. Le retiró a Sáenz de Santamaría de portavoz del Gobierno y hará lo propio con Cospedal, a quien le eximirá de sus responsabilidades en la cúpula del PP.
La secretaria general, muy combativa en el empeño de mantener sus dos cargos, considera que no hay problemas de incompatiblidad. En su entorno se difunde la idea de que Cospedal no será apartada sino que se le pondrá un ‘coordinador general’ para llevar el día a día del partido. Anteño lo fue Ángel Acebes ahora lo sería Fernando Maillo, el hombre que controla la sala de máquinas de Génova desde hace año y medio.